Las pocas "peseras" que circulaban por las calles de Cancún fueron encerradas en las instalaciones de la empresa que, se ubica a unos metros del cruce de las avenidas Nichupté y José López Portillo, ante una presunta amenaza que recibieron los directivos de desconocidos, quienes los obligaron a parar actividades o atenerse a las consecuencias.
Ante ello, las últimas "combis" que realizaban el servicio en la ciudad fueron encerradas en los patios de la empresa citada. Ante la advertencia dos patrullas con elementos de la Policía Quintaba Roo se apostaron en el lugar para dar seguridad, a la entrada del encierro mencionado.
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Mientras trabajadores de las unidades de pasaje se mantenían en el lugar para hablar con los dueños y pedir apoyo económico, ya que llevan días sin trabajar.
Los chóferes en entrevista comentaron que la empresa no va a cerrar sus puertas, y que trabajan dos días por semana para ayudarse económicamente.
Cabe destacar, que los ataque que llevaron a los directivos de la empresa a encerrar sus unidades comenzaron en el mes de abril, cuando una Urvan fue incendiada en el fraccionamiento Cuna Maya, posteriormente otra unidad fue quemada en su totalidad en la Región 251 en el fraccionamiento Paseos del Mar, el tercer ataque se verificó en Villas Otoch Paraíso donde desconocidos balearon una "pesera", posteriormente dos unidades fueron baleada en el fraccionamiento Cielo Nuevo y finalmente otra camioneta de pasaje fue consumida en su totalidad en el Región 254.