Con dos fotografías tomadas con aproximadamente 15 años de diferencia entre sí y un análisis fotográfico que concluye solo en un 80 por ciento, la Fiscalía General de Quintana Roo aseguró que el hombre detenido y posteriormente liberado durante el miércoles pasado no es José Gil Caro Quintero, alias el "Pelo Chino" a pesar de que aceptó que no existen pruebas dactiloscópicas o genéticas que confirmen esta versión.
En una explicación de aproximadamente 20 minutos realizada por un perito experto en identificación humana de la Fiscalía General del Estado, se aseguró que la persona identificada en los medios de comunicación no corresponde al líder del Cartel de Caborca.
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Se detalló que el análisis consiste en una comparación de imágenes, a pesar de la temporalidad, posición, dureza e iluminación de las mismas, que no se tuvieron en cuenta al realizar dicho comparativo, pero constan en la carpeta de investigación que se lleva a cabo por este caso.
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Se enfatizó que en la confrontación y análisis pericial, se tomaron en cuenta índices morfológicos mínimos y máximos con metodología cefalométrica y antropométrica para descartar cualquier cambio que pudiera haber sido realizado por una cirugía plástica, rasgos fenotípicos.
Se destacó que en la fotografía reciente se aprecia una cara más estrecha, mientras que en la foto de archivo se trata de un rostro más amplio. Además, la base de la nariz, el cuello y la amplitud de los ojos no coinciden. En resumen, se encontraron aproximadamente 13 puntos de discordancia.
El perito reconoció que la efectividad de este análisis fotográfico es de aproximadamente un 80 por ciento, de acuerdo con su experiencia.
Ante las preguntas, el fiscal intervino para informar que el hombre de la foto se registró en un hotel de Playa del Carmen como Efraín N y admitió que no se realizaron pruebas dactiloscópicas y de ADN porque no se encontró ningún elemento ilícito que justificara su detención.
No obstante, el fiscal admitió que los policías que participaron en la entrevista con el presunto fueron separados de sus cargos y están realizando tareas administrativas mientras se llevan a cabo las investigaciones para determinar lo sucedido.
El fiscal general de Quintana Roo aceptó que todavía se está trabajando en las investigaciones para determinar quién es el hombre que se entrevistó con los elementos de la policía, pero por el momento han concluido que no es Quintero, a pesar de la falta de pruebas concluyentes y con un margen de error de más del 90 por ciento.
Cabe mencionar que el fiscal no explicó por qué los agentes de la policía preventiva y los efectivos de la Secretaría de Marina (Semar) de Tulum fueron retirados por los agentes de investigación, quienes alegaron que se harían cargo de la situación. Además, no proporcionaron el nombre del agente a cargo de la operación, lo cual fue informado al C5 por los efectivos que realizan tareas de prevención del delito en Tulum.
Como se informó oportunamente, un hombre fue detenido el miércoles pasado en el restaurante Burrito Amor de Tulum, supuestamente José Gil Caro Quintero, quien sobornó con 15 millones de pesos a los agentes ministeriales para que lo liberaran. Sin embargo, la comparación de dos fotografías realizada por la FGE arrojó que no era el líder criminal mencionado anteriormente.
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HS