Un abuelito fue víctima de un secuestro virtual la mañana de este martes, cuando vía telefónica lo contactaron para extorsionarlo, pues mientras a él le decían que su hijo estaba secuestrado, a éste último le pedían dinero por el rescate de su padre; tras un operativo de búsqueda lograron encontrar al hombre de la tercera edad en la supermanzana 66.
Policías municipales y estatales se movilizaron la mañana de este lunes, cuando se recibió a través del número de emergencias 911, el reporte de una privación de la libertad, en un domicilio de la avenida Chichén Itzá, en este lugar se entrevistaron con un hombre quien explicó que recibió una llamada en la que le exigían el pago económico por liberar a su padre.
La versión preliminar indicó, que unas horas antes perdieron todo contacto con la víctima, pues al querer llamarlo a su celular mandaba a buzón, de igual forma las aplicaciones de mensajería estaban bloqueadas; en ese momento las fuerzas del orden iniciaron un operativo de búsqueda en la zona.
Fue más tarde cuando en los recorridos por las calles de la supermanzana 66, en los alrededores de la zona conocida como “El Crucero”, ubicaron un vehículo que coincidía con las características del que conducía la víctima, al acercarse los policías confirmaron que el abuelito estaba en el interior.
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Los policías hablaron con el hombre quien explicó, que recibió una llamada en la que le dijeron que tenían secuestrado a su hijo, y debía pagar una fuerte suma para su liberación, durante la extorsión le dijeron que no debía cortar la llamada de lo contrario le harían daño a quien supuestamente tenían secuestrado.
En la otra línea, al joven le dijeron que su padre había sido privado de la libertad, pues también le pedían que depositara dinero a través de una cuenta de la tienda de conveniencia Oxxo. Tras aclarar la situación, los afectados se retiraron de la zona, indicando que después acudirían a la Fiscalía General del Estado para denunciar formalmente este delito.
Los casos de secuestro virtual se han hecho más frecuentes en la ciudad, apenas el mes pasado de manera simultánea se dieron dos casos, cuando los menores de edad de 12 y 13 años, fueron contactados por estos extorsionadores, quienes los hicieron ir a supermercados, mientras que por una segunda línea les pedían dinero a sus padres. Afortunadamente, las autoridades han logrado cortar las comunicaciones y frustrar los depósitos a las cuentas bancarias de los delincuentes.
