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México
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A 17 kilómetros de Mérida, Yucatán, se encuentra ubicada la zona arqueológica deDzibilchaltún, palabra maya que significa “Donde hay escrituras en las piedras planas”.
Este lugar se ha convertido en un punto turístico importante para propios y extraños, pero no siempre lució como hoy se encuentra.
Se cree que Dzibilchaltún alcanzó una población de hasta 200 mil habitantes y hace 70 años la entrada era por senderos. Su principal atractivo, “El Templo de las Siete Muñecas”, no lucía como hoy, apenas se alcanzaba a ver su estructura la cual es admirada durante el Equinoccio de Primavera.
En las fotos que se difundieron a través de Artes México se ve cómo era la zona. En el terreno se encontraban conjuntos arquitectónicos dispersos con pirámides y edificios abovedados.
Dzibilchaltún es de los sitios arqueológicos en Yucatán que son menos conocidos, a pesar de ser considerada una de las ciudades mayas más grandes.
Se dice que en su interior hay más de ocho mil estructuras, las cuales son visitadas cada año, aunque en menor proporción a la zona arqueológica de Chichén Itzá.
El templo es conectado con el resto del sitio por un sacbé largo, Sac-blanco y Bé-camino y hacia el centro con el cenote Xlacah-pueblo viejo.
Dzibilchaltún no sólo es edificios mayas, en su interior también se encuentra un cenote el cual lleva por nombre X'lacah el cual significa pueblo viejo. Este ha sido un punto obligado de visita para la época de calor por su cercanía con la ciudad de Mérida.
Según se ha informado, al interior se han encontrado vestigios mayas como vasijas, huesos tallados y objetos de madera.
Actualmente la zona arqueológica de Dzibilchaltún se encuentra cerrada por ejidatarios de Chablekal, quienes exigen al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) una indemnización por el uso de 55 hectáreas que comprenden este atractivo.
Cabe recordar que durante una Asamblea Ejidal de Chablekal y el INAH se pactó una tregua para dejar de emitir señalamientos en contra, previo a la que podría ser la reunión definitiva para la firma de un contrato de ocupación.
Con información de Arte México
JG