Antier desperté llena de impotencia, atónita ante las atrocidades que se permiten en nuestro golpeado país. Lo que hicieron los diputados del nada honorable Congreso del Estado de Yucatán al llevar a los especialistas de Producción Alimentaria Porcícola (PAPO) a “revisar” la mega granja no sólo fue indignante, si no que valida la violación a una orden judicial.
Nos encontramos en presencia de una lucha de poderes, donde el Legislativo juega un papel muy peligroso intentando mermar la credibilidad del Poder Judicial e imponerse como órgano juzgador que de validez a la granja en este proceso. Dichas acciones no pueden ser señaladas más que como un ataque, una confrontación, una invasión a los atributos del Poder Judicial y, por tanto, una amenaza a la división de poderes en la que se basa nuestro Estado mexicano.
Muchos procesos legales con respecto a la granja fueron encarpetados, negados o puestos en pausa para ser parte del olvido, señalando que el caso era demasiado complejo para ser abordado. Sin embargo, hace unos meses encontramos un caso extraño, casi único, una luz brillante que se diferencia del mar de corrupción que le sofoca, se trata de la Juez Cuarta de Distrito, Miriam Cámara Patrón, la única que ha demostrado tener “sentido Homún” en todo este proceso.
Después de una inspección de parte del Poder Judicial a las instalaciones de la granja, la Juez determinó que esta debería suspender labores de forma definitiva hasta el término del proceso de amparo por el riesgo que implica para la salud del acuífero y de los habitantes de la península, lo cual incluye la sustracción inmediata de todos los cerdos de las instalaciones. El plazo máximo ya fue vencido, estando hoy en día en desacato y habiendo sido validada la violación de la ley de parte del Legislativo y el Ejecutivo estatal.
La visita de los diputados a la granja en vísperas del vencimiento de dicho plazo no es más que un claro intento por dividir a la opinión pública, los medios que han respondido a tal llamado han demostrado su verdadero rostro. Nada de sorprenderse de los medios pertenecientes a Grupo Sipse, empresa de los mismos dueños de la mega granja de Homún. Afortunadamente, el POR ESTO! se mantiene en una lucha por la cobertura objetiva de esta problemática, dándole justa voz a todas las partes.
Así, el pasado lunes pudimos ver el despliegue de los investigadores que vergonzosamente prestaron su nombre a este tipo de procesos, intentando validarse en sus universidades de pertenencia, Tecnológico de Mérida, UADY y UNAM. Sin embargo, hay investigadores de estos mismos planteles que se han manifestado en contra con argumentos de gran veracidad científica ¿Por qué no los invitaron a ellos entonces? El que nada debe, nada teme.
Así mismo no estuvieron invitados especialistas de gran reconocimiento nacional e internacional, cuyos estudios son fundamentales para el análisis de la problemática que nos atañe. Por ejemplo, miembros de la Asociación Mexicana de Estudios sobre el Karst, como el Dr. Francisco Bautista y la Dra. Yameli Aguilar, cuyos estudios sobre la vulnerabilidad del suelo peninsular son fundamentales para la aprobación de cualquier proyecto en el Estado; o el Dr. Angel Polanco, experto en contaminación microbiológica del agua e impactos en salud pública.
Durante el trayecto pudo constatarse que todos los cerdos siguen dentro pese al mandato de la Juez, e incluso los dueños de PAPO afirmaron que tardarían al menos un mes más en sacarlos. Una declaración de desacato de una orden judicial a pleno día y teniendo como respaldo y testigos a los mismísimos diputados. ¿En qué clase de país vivimos si ni por los medios correctos se puede alcanzar justicia y los empresarios se eximen de acatarla por sus grandes recursos e influencias?
Los empresarios no temieron en afirmar que tienen, al menos, 30 mil cerdos en las instalaciones, pero que la planta de tratamiento y demás tecnología no está terminada, al mismo tiempo que afirman “no puede haber contaminación porque no está operando”, como si los cerdos no estuvieran produciendo excretas o como si albergar todas estás en una piscina gigante sin tapa no pudiera producir daño alguno.
Uno de los puntos que no han querido abordar, ni los empresarios ni los medios de comunicación, salvo la honrosa excepción del Diario de la Dignidad, Identidad y Soberanía, fue el terrible olor que se siente desde fuera de las instalaciones de la granja. Debemos recordar que ha sido muy señalado cómo a través del aire también se produce contaminación, es decir que no solamente se pone en riesgo la visita del turista que mantiene económicamente a más del 70% de los pobladores de Homún, si no la salud misma del pueblo, especialmente la de los niños y niñas de este municipio, principales afectados por su corta edad. Dicha omisión también está presente en la Manifestación de Impacto Ambiental que presentó la granja para la aprobación del proyecto, la cual no menciona NINGUN tipo de tratamiento para los olores generados, y que hasta el día de hoy siguen sin resolver.
En el comunicado oficial de la Fracción Legislativa de MORENA afirman que durante el recorrido hicieron preguntas sobre el procesamiento y disposición final del agua utilizada en los diversos procesos y la respuesta fue contundente, “sólo el 30% del agua sería reutilizada para los procesos de la granja y el otro 70% se pretende utilizar para el riego de pastizales para forraje. O sea, esa agua terminará en los mantos freáticos de la zona.”
En principio dijeron que dicha agua serviría para 25 hectáreas de pasto, pero luego el empresario habló de cultivos de consumo humano. “No creo que puedan provocar contaminación por su equipo de avanzada”, afirmó la diputada Silvia López Escoffié.
Me pregunto qué credenciales tiene para hacer tal afirmación, y si el que ella “crea” que no va a haber daño es garantía para los habitantes de la península. Sería oportuno invitarla a consumir dicha agua o los productos comestibles que de su riego nazcan, ya que, así como intenta utilizar a Homún como campo de pruebas de esta “nueva tecnología” habríamos de cuestionar quiénes serán los primeros en probar la sanidad de esta agua y alimentos con su ingesta ¿Acaso lo harán los diputados? ¿O será la población de Homún su conejillo de indias?
Otro de los agravantes del caso fue el grupo de personas que llevaron a manifestarse afuera de las instalaciones, reclamando la permanencia de la granja y de sus empleos. Lo que no dijeron es que apenas unos cuantos eran de la cabecera de Homún y que la mayoría son de Polabán (comisaria del mismo municipio), usando esta confusión para intentar mostrar división en el movimiento, e incluso, para señalar a los cenoteros de haber cambiado de opinión. Por ello debo aprovechar confirmar que Ka´anan Ts´onot (Guardianes de los Cenotes) sigue en pie de lucha por la salud del agua y de las familias de la península, y junto con ellos gritamos ¡Homún no se vende! ¡Se cuida y se defiende!
Fue doloroso ver este intento por cambiar la imagen del maya combativo que defiende su territorio por la de uno que pide empleo y el sometimiento de su cultura y su tierra. Aprovechándose, como siempre, del desconocimiento y la necesidad. Como en algunos medios aparece, hubo manifestantes que afirmaron no saber lo que decían sus pancartas por no saber leer español. Una manipulación vil hacia quienes todavía tienen el privilegio de hablar nuestra lengua madre.
Y por si todo esto fuera poco, los opulentes miembros de la oligarquía yucateca se atrevieron a difamar SIN PRUEBAS a los pobladores mayas defensores de su tierra, declarando que les han pedido millones a cambio de dejar la lucha, una grave afirmación que han llevado consigo desde el principio del proceso, calumniando a personas honestas y trabajadoras que luchan por la salud de su tierra y su gente.
Un juego sucio y reprochable, sobre todo si recordamos que un miembro de los Guardianes de los Cenotes sí fue amenazado junto con su familia por estar en esta lucha, existiendo pruebas y con la Policía Estatal de por medio en el caso. Pero los grandes empresarios siempre son las víctimas en este país.
No está de más recordarle a las autoridades implicadas en esta problemática que, sobre cualquier dilema medio ambiental y tecnológico están los derechos humanos, ya que ante todo se encuentra el derecho de los pueblos a la libre determinación para decidir sobre sus recursos y forma de vida; y el convenio 169 de la OIT, el cual especifica que antes de la aprobación de cualquier proyecto en territorio indígena debe haber una consulta libre, PREVIA e informada. Esta es la decisión del pueblo de Homún, no de los diputados, no del Ejecutivo, y Homún ya dijo NO.
Afirman que PAPO está dejando un precedente no sólo para Yucatán, sino para todo el país, y en efecto lo están haciendo, pero no por su tecnología “de avanzada” sino por la violación a los derechos de los pueblos indígenas y por haber realizado el acto con menos sentido común de todos los tiempos: poner una mega granja porcícola encima de la Reserva Estatal Geohidrológica Anillo de Cenotes, área natural protegida que representa parte significativa de uno de los acuíferos más importantes del mundo, en la zona de mayor vulnerabilidad del suelo en el Estado, en plena crisis planetaria de recursos. ¡Bravo PAPO! Son todo un ejemplo de la política de desarrollo de México, ilógica y sin “sentido Homún”.
Y lo más grave de todo, este circo está hecho para quitar la atención del verdadero responsable de garantizar que los cerdos fueran extraídos de las instalaciones, el gobernador Mauricio Vila. Según la orden de la Juez, es el Poder Ejecutivo el responsable de dichas acciones. Sin embargo, el mandatario estatal ha mantenido un silencio inaudito, permitiendo que las críticas se dirijan hacía el Legislativo, que nada tendría que hacer en esta polémica.
Invito públicamente a quien se dijo defensor del pueblo y del medio ambiente a que salga a dar una declaración, que dé su posición con respecto a la granja, que le explique al pueblo que votó por él la razón por la que está desacatando la orden de una Juez y a quién benefician estas acciones. Le exijo como ciudadana el cumplimiento de ley.
Debe saberse que los verdaderos expertos están llevando un proceso de peritaje de la granja y que la decisión de la Juez se dio después de una inspección. Es decir que todo lo que mostraron el pasado lunes ya ha sido revisado por la autoridad que decretó la suspensión definitiva.
Invito a todas las partes a seguir el debido proceso judicial, donde se dará verdad a este caso que involucra la salud de toda la península y de una de las reservas de agua más importantes del mundo.
No debemos olvidar nunca que sin tierras comunales no hay desarrollo de la cultura maya viva, sin cultura maya no hay cuidado de los montes, y sin montes no hay agua, no hay aire, no hay milpa, no hay abeja, no hay plantas, no hay vida, no hay NADA. De eso se trata el principio precautorio, de querer evitar el decir “se los dijimos”.