Cuatrocientos cincuenta y un yucatecos han sido deportados de los Estados Unidos en lo que va del año, la mayoría por faltas menores como infracciones de tránsito o altercados familiares, informó ayer el director del Instituto para el Desarrollo de la Cultura Maya (Indemaya), Eric Villanueva Mukul.
Entrevistado en el Salón de la Historia del Palacio de Gobierno, el funcionario dijo que aun cuando el presidente Donald Trump se vea más radical y xenófobo, fue durante la gestión de Barack Obama cuando se registraron más deportaciones.
Dijo que espera que este año se eche a andar el Fondo de Apoyo a Migrantes de la Secretaría de Desarrollo Social para que los repatriados puedan iniciar algún tipo de negocio en sus localidades, y no se vean obligados a regresar del otro lado de la frontera.
“Vacunados”
El funcionario dijo que los yucatecos repatriados casi no piensan en volver a los Estados Unidos, porque la mayoría llegan “vacunados” para no retornar.
La cifra de repatriados en el 2017 fue de 455 y “muy pocos fueron los que cometieron delitos, la mayoría fueron incidencias mínimas, posiblemente excedieron los límites de velocidad, se volaron un alto o tuvieron un problema con sus familias, y como están de manera irregular, los agarra la migra y van para fuera”, dijo.
Indicó que el Indemaya se coordina con el Instituto Nacional de Migración y el Consulado de Estados Unidos, que les reportan cualquier conflicto relacionado con ciudadanos yucatecos, para que los atiendan y los apoyen a regresar a su comunidad de origen.
Remesas, al alza
Por otra parte, dijo que las remesas del 2018 ascenderán a los 4 mil millones de pesos, cifra superior a los 3 mil 500 millones de pesos del año pasado.
En otro tema, Villanueva Mukul aseguró que la administración estatal pasada tenía descuidada esa dependencia gubernamental, así como las políticas públicas a favor de la población indígena de Yucatán.
“Lo tenían un poco descuidado en sus actividades sustantivas, bajaron mucho particularmente en los últimos dos años”, señaló. Por cierto, en el evento de “Cabecitas Blancas” que presidió el Gobernador Mauricio Vila Dosal se vio a la priísta Rosario Cetina Amaya, pero no se supo en calidad de qué fue.
Sin embargo, el funcionario dijo que las nuevas autoridades llegaron al Indemaya con gran entusiasmo, “no venimos a reclamarle a nadie, más bien, a ver cómo vamos hacer las cosas bien”.
Círculo vicioso
El Indemaya se encontraba en un círculo vicioso, “en donde descuidaron la dependencia y descuidaron a los de allá (a los maya hablantes)”. Incluso, declaró que el personal ya había perdido el ánimo y la convicción.
Dijo que ahora no sólo hay el conocimiento sobre la cultura maya, sino también el compromiso y el entusiasmo para llevar a cabo políticas públicas que beneficien a este sector de la Entidad.
“Van a mejorar las condiciones materiales porque habrá un poco más de recursos, se van a ampliar las políticas públicas e incidir no sólo en el desarrollo de la cultura y el mantenimiento de la lengua maya, también en el crecimiento económico de sus comunidades”, afirmó.
Al preguntarle acerca de cuánto aumentará el presupuesto del Indemaya para el próximo año, Villanueva Mukul sostuvo que se debería incrementar al infinito y más allá, pero eso dependerá de cómo el Gobierno del Estado lo plantee.
“Es como una sábana, si jalas el presupuesto para un lado descobijas el otro, pero existe el ofrecimiento de que va a aumentar de manera considerable”, agregó el director, quien recordó que para este 2018 se ejercieron más de 20 millones de pesos.
(Rafael Gómez Chi)