Rogelio Jiménez Pons, quien estará al frente del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) y se encargará del plan del Tren Maya Peninsular propuesto por el Presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, reiteró hoy al sector empresarial que en diciembre próximo arrancarán las “obras menores” y las licitaciones necesarias para ese proyecto que contempla un recorrido de más de 1,500 kilómetros y que detonará toda la zona.
Jiménez Pons se reunió ayer con integrantes del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) de Yucatán, a quienes explicó los pormenores del proyecto y expuso que el hecho de que se haya incluido a la Entidad da muestra de la importancia que ésta tiene para el Presidente electo.
Dijo que todavía se están evaluando diferentes alternativas, pero resaltó que será un proyecto integral que genere bienestar en toda la región, además de que su licitación será transparente. Recordó que con la inclusión de Yucatán la vía tendrá un recorrido de unos 1,500 kilómetros, pero una buena parte se hará con vías existentes.
De esta forma, dijo que en diciembre empezarían las “obras menores” del proyecto, como son intervenciones para hacer terracerías y pasos, así como la modernización de las vías ya existentes, rectificación de curvas y cambios de durmientes, entre otras.
Generar empleo
“Son mil 500 kilómetros, hay todo tipo de obra y vamos a empezar por lo más fácil”, expresó.
Agregó que los trabajos iniciales son más bien administrativos y dijo que la instrucción de López Obrador sobre el particular es generar empleo y beneficiar a las zonas en el siguiente orden: local, estatal, regional y nacional.
Dijo que ya se cuenta con el 95 por ciento de los derechos de vías y que, en este sentido, no se tocarán zonas donde no se hayan realizado consultas sociales y estudios de impacto ambiental. En este tenor, dijo que para realizar este proyecto no habrá expropiaciones y que esa es una orden expresa del Presidente electo.
“La palabra expropiación está prohibida, porque buscaremos que todos los grupos se suban al desarrollo y, en este sentido, habrá inclusión de todos”, comentó.
Dijo que el proyecto tiene un costo estimado de 120 a 150 mil millones de pesos, que serán financiados en parte con los recursos del Consejo de Promoción Turística de México, pero aseguró que esto no significa que se afectarán los recursos para promoción.
Aseguró que habrá más recursos con la lucha contra la corrupción, además de que se optimizarán los recursos del Consejo y se destinarán menos recursos a gasto corriente, además de que se adelgazará el esquema de incentivos y se revisarán las actividades de promoción en el extranjero para tener ahorros.
No se descuida promoción
“Hay oficinas en el extranjero duplicadas, tenemos el sistema de embajadas de México en el extranjero con sus agregados comerciales y vamos a utilizarlas para hacer promoción turística. No se descuida la parte de promoción, se ajusta. Es preferible para el país tener mayor gasto en inversión productiva como el tren, que en gasto corriente”, agregó.
Además de los recursos de este Consejo, dijo que desde luego se invitará a la inversión privada nacional y extranjera, pues hay elementos, como las locomotoras, que no se fabrican en México y en este caso dijo que ya ha habido acercamiento con empresas extranjeras de países como Corea, España, Francia, Estados Unidos y Alemania.
Precisó que en diciembre, cuando tome posesión el nuevo Gobierno Federal, se harán las licitaciones correspondientes.
Jiménez Pons apuntó que en el mismo tren se darían diferentes usos a los vagones, pues tendría que haber una parte que sirva para el transporte de trabajadores, otra zona de lujo para turistas, así como otra más accesible para turistas tipo “mochileros”, además del aspecto comercial.
Subsidio
En el caso del transporte para trabajadores y otros sectores, el precio del pasaje sería subsidiado por el gobierno hasta en un 90 por ciento, como se hace en otros países.
“Buscaremos que el ferrocarril sea una experiencia agradable, que sea exclusivo, para trabajadores, para el turismo de jóvenes mochileros, en general, que sea accesible para todos”, comentó.
Acerca de la ruta, dijo que la ruta original iba de Palenque, Chiapas, a Cancún, Quintana Roo, pasando por Bacalar, Tulum y Playa del Carmen, pero con la incorporación de Yucatán se establecerá una ruta del otro lado, con las vías que ya existen, lo cual aminorará costos.
Finalmente dijo que aún se estudia el trazo, que pudiera ir de Cancún a Valladolid, luego a Mérida y Chichén Itzá; asumismo se estudia llegar a un lugar cercano a Uxmal, hacia abajo, pasando por Campeche y hacia Palenque.
(David Rico)