En los últimos tres años, 137 personas han sido diagnosticadas con la enfermedad de Chagas, por lo que ya son cerca de 500 los habitantes del Estado que padecen ese mal y el 30% de ellos presenta problemas cardiacos, indicó el Secretario de Salud estatal, José Eduardo Mendoza Mézquita.
El funcionario otorgó reconocimientos a las fundaciones de la Sociedad Americana de Ecocardiografía (Asef, por sus siglas en inglés) y de la Asociación Nacional de Cardiólogos de México (Ancam) Phillips México, en el arranque de las Jornadas de Ecocardiografía en el Hospital General “Agustín O´Horán”, ayer por la mañana.
Durante su mensaje en el auditorio del nosocomio, el funcionario precisó que el grupo de edad con mayor afectación oscila en el rango de 30 a 50 años y se localizan en prácticamente toda la geografía estatal.
Mendoza Mézquita dijo que esas organizaciones se caracterizan por su dedicación profesional y altruista, ya que es la primera vez que se hacen las ecocardiografías en la Entidad.
Ante el director del Programa de Prevención de Enfermedades Transmitidas por Vector del Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades (Cenaprece), Gustavo Sánchez Tejeda, Mendoza Mézquita agradeció el respaldo de estas instancias para apoyar a las y los pacientes.
Es curable
En el mundo hay de seis a siete millones de personas infectadas por el parásito Trypanosoma cruzi; el mal es curable si el tratamiento se administra al poco tiempo de producirse la infección. En la fase crónica, un tratamiento antiparasitario puede prevenir la progresión de la enfermedad; sin embargo, un 30 por ciento de los afectados crónicos presentan problemas cardíacos.
Detalló que, al no existir una vacuna contra este mal, el método más eficaz para prevenirlo en América Latina es el control vectorial o el estudio de la sangre donada para prevenir la infección por transfusiones sanguíneas y donación de órganos.
Estas jornadas, con duración de tres días, permiten la realización de las ecocardiografías, que tiene un costo aproximado de 250 dólares. En esta ocasión la meta contemplada es de 270 estudios, que serán vitales para brindar los cuidados clínicos y tratamiento oportuno a los pacientes y esto gracias al tiempo, conocimiento y solidaridad de los profesionistas participantes.
Por su parte, la jefa de medicina preventiva de los Servicios de Salud de Yucatán, Celmy Josefina Durán Caamal, informó que cerca de la capital yucateca se han detectado casos en Acanceh, Halachó, Kanasín, Umán, Kantunil y Sotuta, así como en el Oriente del Estado, en Chichimilá, Espita, Panabá, Tekom, Tinum, Tizimín , Valladolid, Yaxcabá y, en el Sur, Oxkutzcab, Tekax y Ticul.
Señaló que en numerosas ocasiones las personas no recuerdan haber sido picadas por la chinche hocicona, mejor conocida como pic en el medio local; sin embargo, los pacientes ya presentan males cardiacos.
Muchos de los diagnósticos por Mal de Chagas se dan a través del Banco de Sangre, ya que los pacientes que se sienten sanos, debido a la naturaleza asintomática de la enfermedad, acuden a esos centros a donar plasma y, al momento de realizar los análisis, salen positivos a este padecimiento.
Menos casos
La cultura de la donación altruista de sangre ha contribuido a la detección de esta enfermedad, pues en el 2016 se detectaron 58 casos de Mal de Chagas, al siguiente año contabilizó 43 y, en este 2018, hasta la fecha se han registrado 36 incidencias de esta enfermedad. Es decir, se ha reducido el número de pacientes atendidos por ese mal.
La chinche transmisora del Mal de Chagas habita en sitios húmedos y en donde se acumula basura, hierba, piedras o maderas, pero no todos los insectos son capaces de transmitir esta enfermedad, sino que son los que tienen un parásito en los intestinos, primero a través de la picada, posteriormente mediante la defecación en esa área, que se infecta cuando la persona se rasca por el dolor.
Las medidas de prevención para mantener a raya el Mal de Chagas son mantener los patios limpios, rociar con insecticidas comerciales los hogares y evitar la acumulación de cacharros o basura.
En el acto estuvieron Rhonda Price, especialista de la Sociedad Americana de Ecocardiografía; Federico Asch, director cardiovascular del Medstar Health Research Institute de Washington, D.C. y Pedro Gutiérrez Fajardo, vicepresidente de la Asociación Nacional de Cardiólogos de México.
Asimismo la jefa de la Jurisdicción Sanitaria No. 1, María Esther Rangel Ramírez, y el anfitrión Carlos Espadas Villajuana, director del Hospital “Doctor Agustín O’Horán”.
(Rafael Gómez Chi)