Roldán Peniche BarreraYucatán Insólito
Yucatequismo de hace muchos años. Al principio, lenguaje de adolescentes enamorados, y luego de adultos. Una persona “está metida” cuando se encuentra locamente enamorada de otra.
En una de las acepciones del DRAE sobre dicha palabra, redacta:
METIDO, A. Adj. Estar muy metido en algo. Estar muy comprometido o muy ocupado en un asunto.
Mas no alude al enamoramiento, resultándonos incompleta para nuestra habla coloquial.
Más comprensible encontramos la definición de Rodríguez Cimé, a pesar de que no se ocupa de la voz “metido” sino del verbo “meterse”, donde ya entendemos el mensaje:
Meterse (Palomillas) Enamorarse.
Mas pasemos a un ejemplo:
-¿Otro café, Becerro…? Le pregunta el Máikel al cliente.
-¿Qué…? ¿Qué dijiste…? -responde como si estuviese “ido”.
-Que si te sirvo otro café…
-Sí… sí… por supuesto… sírveme otro café…
-¿Greca o americano?
-No sé… No entiendo…
-¡Qué si quieres uno en taza chica o en grande! -le explica el Yorch.
-¡Oh, sí…! Perdón… en taza grande… sí, sí… ¡claro!
Voltea el Máikel y le dice sotto voce al Yorch: ¡Oye, qué le pasa al Becerro… ha estado así toda la mañana. No entiende lo que le digo. Está como ido. ¿Qué le pasa?
-Es el amor, Máikel -responde el Yorch- vive en las nubes. Está remetido con la X’Fina Pelos…