Sacerdotes exhortan a los jóvenes a edificar la paz

TIZIMIN, Yucatán, 20 de septiembre.- “La paz y los jóvenes caminan juntos”. Esta es una cita emitida por el Papa San Juan Pablo II en 1986 que recordó el párroco, Luis Fernando Góngora Góngora con motivo del Día Internacional de la Paz que se celebra cada 21 de septiembre.

Lo anterior para exhortar a los jóvenes a construir y edificar la paz desde los cimientos del amor, respeto y responsabilidad, siendo un buen momento para que los jóvenes sean los protagonistas de construir este llamado que urge en el mundo entero y en las familias.

Externó que un mundo y una familia en paz es un mundo y una familia fraternos, puntualizando que si hay armonía con su persona la habrá con los demás.

Por lo que invita a todos los habitantes a hacer a un lado los resentimientos sociales, complejos que uno tiene, ya que si uno no se ama, no se quiere, lo refleja en su alrededor, pero en cambio cuando es todo lo contrario se convierte en promotor de paz.

También Invitó a la feligresía a construir juntos la paz desde las familias, el trabajo y donde se encuentren concluyendo “Si quieres la paz, defiende la vida”.

En tanto que el Vicario, David Tejero Vega compartió que todo ser humano tiene derecho a vivir en la paz, en el orden que lleva vivir el bien común, respetando la vida de cada uno, para desarrollarse como humanos.

Explicó que cuando no respetamos y estamos en orden, el ser humano se puede desarrollar de forma más fructífera.

Señaló que cuando vivimos en paz, vivimos en armonía, “en pleito, guerra y división toda la ciudad vive en tensión y no hay armonía para desarrollarse, si de por sí la vida ya tienen tensiones en el trabajo o estudios, la paz se rompe y no se vive con tranquilidad”, puntualizó.

Recordó que los obispos mexicanos exhortan a vivir en la paz, seamos constructores de paz e invita a que oren por la paz, pero que no sólo no es no meterse con nadie, sino construir la paz promoviéndola con nuestros semejantes, con el respeto en la vida de los demás, sin alentar a la gente que quiere destruir, ya que no hay que aumentarles los ánimos de pleito, porque no sólo se trata de evitar las armas sino también la guerra y la discordia entre nosotros para vivir la paz.

“No sólo es orar, amémonos los unos a los otros como Él nos ha amado; debemos ser promotores y constructores de la paz porque somos llamados a esto”, enfatizó.

Para finalizar, mencionó que debemos vivir en paz donde nos encontremos, respetando el orden en donde nos desenvolvemos, con el saludo, con armonía y si alguien te ofende no pagarte con la misma moneda, siendo conciliadores cuando surgen pleitos, puesto que la guerra inicia cuando uno piensa “aquí me la hace y aquí me la paga.

“Aprendan aponerse en el lugar del otro, ser empáticos”, finalizó.

(POR ESTO! / Corresponsalías)