Yucatán

Por Eliseo Martín Burgos

Cuentan que el gran escritor francés Honorato de Balzac se quejaba de lo poco que ganaba con sus libros. Y un amigo le dijo:

-¿Y la gloria, no cuenta?

-¿La gloria? Con la gloria no puedes pagar nada. Y a los demás, mi gloria sólo les causa contratiempos.

Y como ejemplo contó que una vez, en Rusia, le invitaron a una reunión; entró cuando una dama servía té y en las manos tenía una bandeja con la tetera. Cuando le dijeron que era el señor Balzac, dejó caer la bandeja con la tetera, de porcelana china que costaba un dineral.

Antología del Chascarrillo

Segunda Epoca