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Yucatán

'Parir chayotes”: sufrir mucho al realizar una tarea

Roldán Peniche Barrera

Yucatán Insólito

Auténticamente yucateca esta expresión. Y de antiguo.

Rodríguez Cimé lo menciona en su diccionario juvenil pero en su más familiar significado: “El que se invita solo en un almuerzo y come a costa de los demás comensales”.

Lo dice claramente el aludido:

Chayote (Palomillas): quien acostumbra beber o comer, invitado por otros.

El Dr. Güémez por ahí va:

chayote adj. Del náhuatl chayohtli. Persona que gorrea. Que se cuelga o vive colgado como el chayote. Esta denominación fue conocida mayormente en el Estado de Quintana Roo. (Opinión esta última del sabio Dr. Amaro Gamboa)

Ejemplo:

En el Moncho’s, el Becerro habla de su próximo “santo”:

-Ya se acerca, sabios -anuncia henchido de orgullo-. Ya viene.

-¿De qué hablas, Bece? -pregunta el Yorch.

-De mi “santo”…

-Y a quiénes invitarás…

-A todos, sabios o no sabios.

-No faltará el tío Pascual.

-No, a ese “chayote” ni en pintura…

-Bueno, eso ya lo sé -dice el Yorch-, pero lo que nos interesa platicar es eso de “parir chayotes”, no simplemente de “chayotes”, voz de la que todos sabemos es muy usual en Yucatán…

-Oye, de veras. Sin querer, cambiamos el tema…

-Claro, Bece, de tu “santo” pasamos a tus posibles invitados, y yo te mencioné al tío Pascual…

-Sí, y yo te respondí que no pienso invitarlo por “chayote”, esto es, “que no da ni la hora”. Ahora bien, es necesario para celebrar la fiesta mover una serie de grandes estantes y la mesa del comedor que es enorme y…

-¡Ya párale, Bece! Si se trata de “parir chayotes” no cuentes conmigo.

Triste noticia: falleció el filósofo Marín Pérez

Con lágrimas en los ojos, el juglar y poeta festivo D. Jaime Celis y Trejo, natural de Halachó y miembro del Club de los Sabios al mando del Sabio Mayor D. Marbi Yervez, anunció a los honorables miembros de dicho Club, la reciente defunción de D. Manuel Jesús Marín Pérez, (a) “El Filósofo”, después de larga dolencia en su natal Halachó sin que, por motivos estrictamente personales, mismos que rigurosamente respetamos, se nos haya proporcionado la suma de sus años: “Ha fallecido el filósofo Marín Pérez, filósofo de pensamiento y mi conductor en sus ratos libres -reiteró D. Jaime enjugándose una lágrima-. Lo recordaré siempre por su proverbial seriedad y sus largas y blancas barbas que completaban su porte filosofal. Le he dado la fúnebre noticia al sub-grupo de sabihondos del Moncho’s y tanto el presidente D. Julián Victoria, como su secretario el relator D. Yorch han lamentado de profundis tan desafortunado suceso. D. Julián estaba inconsolable, lo que entendemos. Decanse en paz D. Manuel Jesús Marín Pérez, le deseamos, y transmitimos nuestras más sinceras condolencias a sus familiares, J. Celis, J. Parra, Dr. y Cap. Tomás Mendiburu, Poeta Elman Rosado, A. Novelo, V. Lara y 20 firmas más.

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