Empujar” no es siempre aventar a un individuo bruscamente; también puede ser convencer a alguien con malas ideas o de plano obligarlo

Roldán Peniche Barrera

Yucatán Insólito

“Más o menos con estas palabras, el DRAE ofrece, de varias, la siguiente acepción:

EMPUJAR 3 Fig. Hacer presión, intrigar o impulsar para hacer o conseguir algo.

Nada dice Rodríguez Cimé, y el Dr. Güémez Pineda tampoco menciona el verbo pero sí “empujador”, lo que ya nos da una idea:

empujador adj. Se llama así a las personas que azuzan, que presionan, que tratan de convencer, que engatusan a alguien para hacer algo. (Tomado del vocabulario de Fernando Espejo)

Hay una frase yucateca bastante vulgar que se dice aludiendo a este tipo de personas de malas ideas: “Empujadores al muelle”, por aquello de ciertos individuos que frecuentan los muelles de nuestros puertos y a modo de juego peligroso, lanzan un empujón a quienes están en el muelle contemplando al paisaje. Claro, paren en el mar, o como dice el culto Abog. Bello y Paredes: “¡Me caigo al mar!”.

Ejemplo:

Grita furioso el camarero Máikel ante la mesa de los sabios:

-¡Malditos sabihondos! ¿Quién se clavó ayer tres cucharas y dos cuchillos de vuestra mesa?

-Yo fui Máikel -confiesa el Chikis- pero “me empujó” a hacer el Gasolina…

Yucatán: la península que surgió del mar (Concluye)

Por J. Parra Zapata

Aquella bomba sacudió todo el planeta, levantándose el fondo marido e inclinándose el eje terráqueo, al explotar el meteorito compuesto en su mayoría de iridio, todo el planeta se cubrió de polvo, lo que impidió por muchos años el paso de la luz solar y trajo como consecuencia la práctica desaparición de la flora y la fauna, por lo que murieron todos los dinosaurios en la faz de la tierra.

El prestigiado astrofísico yucateco de fama internacional, Arcadio Poveda, dice al respecto: “El Chicxulubazo fue un gran golpe de suerte para Yucatán”.

¿A qué se refería el Dr. Poveda con esa expresión?

Pues nada más y nada menos a que el meteorito que se impactó en Chicxulub hace 65 millones de años, si no lo hubiera hecho o se hubiera impactado en otro lugar del mundo, la Península de Yucatán no existiría.

Y lógicamente nosotros los yucatecos tampoco.

Todos esos prestigiados geólogos y astrofísicos coinciden en que Yucatán es el punto de partida a una nueva forma de vida en este planeta, la de los mamíferos, de la cual proviene el hombre.