Los precios de la gasolina se han mantenido “estables” a lo largo de estos primeros 10 meses del gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador, aunque hay una pequeña diferencia de 20 centavos de más entre el listado de ayer comparado con los que hubo el 3 de diciembre del 2018.
La Magna o regular se vendió ayer en $19.40, la Premium en $20.85 y el diésel a $20.98, en los establecimientos de LaGas. En otros negocios las diferencias fueron de centavos, pero nada significativo.
El 3 de diciembre del 2018 la gasolina tuvo precios promedios en Magna en el país de 19.22 pesos por litro, la gasolina Premium tuvo un precio de 20.80 pesos, mientras que el diésel estuvo a 20.75 pesos.
De acuerdo con especialistas, el precio de la gasolina ha dejado de ser un factor para el costo de la vida, a pesar de la política internacional de los precios del petróleo y el factor de importación de combustibles de nuestro país.
Kanasín y Conkal
El precio de la gasolina se ha mantenido estable, aunque por los meses de marzo y abril de este año se vio en sus niveles más bajos, a menos de 18 pesos el litro de Magna. De hecho, en municipios como Kanasín y Conkal es un peso más barata, debido al establecimiento de regiones que realizó la Comisión Reguladora de Energía.
Apenas en el pasado mes de septiembre los analistas consideraron que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador está listo para amortiguar el efecto del alza de este precio del crudo a través de una menor recaudación en el Impuesto Especial Sobre la Producción (IEPS) a la gasolina, un mecanismo usado desde el sexenio pasado para minimizar este tipo de alzas.
De ese modo, los consumidores pudieran no resentir el efecto al momento de ir a la gasolinera a llenar su tanque en los próximos meses, pero el gobierno sí vera disminuido sus ingresos, concuerdan los analistas.
En septiembre subió el precio del barril de petróleo, pero eso es menos favorable para México que en otros años, e incluso pudiera resultar negativo si continúa la tendencia a la baja de la producción de crudo en el país y el consumo de gasolinas se mantuviera, ya que la balanza energética resultaría deficitaria.
La coyuntura es que nuestro país requiere de mayores importaciones de gasolina y quizá por ello es que el Presidente López Obrador tiene el proyecto de las nuevas refinerías, para que a futuro se pueda contener ese tipo de situaciones.
El caso es que a diez meses de la administración de López Obrador, la gasolina se mantiene “estable” desde diciembre del año pasado.
(Rafael Gómez Chi)