Yucatán

'Ir a una fiesta de traje”: Ser invitado a una fiesta con la condición de llevar algún licor

Roldán Peniche Barrera

Yucatán Insólito

No lo registra el DRAE, como tampoco lo hacen Rodríguez Cimé y el Dr. Güémez Pineda. Es de extrañar, pues la frase es muy común en Yucatán.

“Ir de traje a una fiesta o reventón” no es ir trajeado, de smoking o cosa por el estilo, sino simplemente llevar, en el caso de ser invitado, un “six-pack” de cerveza o una “caguama”, o si quiere uno presumir, una botella de licor, y si es whiskey, mejor…

Esto es, la invitación no es gratis, sino “pagada”, pero con licor…

Nos envía el dicho, el Sr. Aguilar Noguera, quien gusta de apuntar en servilletas o en pequeños papeles, todos los yucatequismos que escucha en el Moncho’s o en otros sitios públicos de la ciudad.

-¿Por qué estará tan contento el Barrigas?

-No lo sé, don Julián -dice el Yorch.

-¡Sí, hombre! ¿No te has fijado, hijo e’Dios, la sonrisota que le adorna la “feis”?

-Sí, jefe, pero eso puede significar que quizás le pegó a la “bolita”.

-¡No! ¡Qué bolita ni que demonios! Se ha estado acariciando la panzota toda la mañana…

-Oiga… de veras.

-Es posible que se deba a que lo invitó Elmerón a otro de sus cumpleaños… Pero el imbécil no sabe que “es de traje”.

-Bueno, jefe, pues se entacucha y ya…

-¡Nada de entacucha! Tendrá que llevar un “misil” de cerveza a lo menos…

PLAN DE DZELKOOP

PRIMERA CHISPA DE LA REVOLUCIÓN EN VALLADOLID

Por Jorge Parra Zapata

En alguna ocasión la Emperatriz Carlota dijo: “No me queda la menor duda que los yucatecos son los príncipes de la avanzada en México”.

“La primicia es algo que los distingue, saben ser los primeros en manifestar su alegría o su inconformidad”.

En otro orden de cosas, cuando el profesor Carlos Carrillo Vega, quien fue un notable impulsor de la educación en Yucatán, terminaba su labor como Director de Educación Pública del Estado, al ser felicitado efusivamente por haber gestionado la creación de la Escuela Normal Superior de Yucatán y la Escuela Normal Preescolar dijo: “Sé que otros vendrán después de mí y lo harán mejor que yo, pero por mi acendrado narcisismo me queda el orgullo, de que lo harán después”.

Todo lo anteriormente expuesto, demuestra, que una de las características de los yucatecos, es el ser iniciadores o emprendedores de algo, que posteriormente se consolida en otra parte del país o del mundo, pero nos queda la satisfacción de haber sido los iniciadores, tal es el caso de la ciudad de Valladolid, considerada la primera chispa de la Revolución, a través del Plan de Dzelkoop, formulado en esa ciudad en mayo de 1910 por los señores Maximiliano Bonilla, José Kantún, Crescencio Jiménez, José Crisanto Chi y Claudio Alcocer, entre otros, todos ellos integrantes del Centro Electoral Anti Releccionista.

El Plan de Dzelkoop, entre otras cosas, decía:

Los que suscribimos el presente plan, queremos evitar que el Estado sucumba en manos de un gobierno déspota y tirano, gobierno formado por una sola familia de esclavistas cuya única ambición es apoderarse de todas las principales riquezas del país y reducir al sufrido pueblo a esclavos de sus ricas propiedades.

El actual Gobierno es ilegal porque no ha surgido del voto popular.

Los integrantes de ese plan luchaban contra el régimen dictatorial de Porfirio Díaz representado en Yucatán por el magnate Olegario Molina Solís.

(Prosigue y concluye mañana).