La industria de la construcción concluirá este año en Yucatán de manera “muy complicada” por la baja en la obra pública y, si no se corrige el rumbo, el año próximo habrá cierre de empresas, advirtió ayer el presidente del Colegio de Ingenieros Civiles de Yucatán, Waldemar Gómez Flores.
Opinó que el problema es de carácter nacional por la reducción presupuestal que tuvieron los gobiernos estatales, lo que ha ocasionado un decrecimiento de la industria del orden del 6 por ciento.
Señaló que, en el caso de Yucatán, el impacto ha sido menor debido a algunas inversiones que ha atraído el Gobierno del Estado, aunque de todas maneras son insuficientes para tener el crecimiento que se había registrado en el Estado en los años pasados.
Gómez Flores señaló que, aunado a ello y a inversiones privadas, el sector de la construcción en el Estado ha decrecido alrededor del 2.5 por ciento y no los seis en promedio que se tiene a nivel nacional.
–Ha sido complicadísimo este año por la baja en la obra pública y porque estábamos acostumbrados a las inversiones importantes que generaban dinamismo económico y crean muchos empleos, acotó.
El 2020 va a ser complicadísimo si no se corrigen las cosas –continuó–, así que hacemos votos y pedimos al Gobierno Federal que no limite los presupuestos y genere obra pública, ya que de lo contrario la afectación será bastante severa con riesgo de cierre de empresas.
(Rafael Mis Cobá)