PROGRESO, Yucatán, 1 de noviembre.- Este día en el puerto se sintió el olor a pibes como parte de una tradición, en los días celebrados a los difuntos, donde en este municipio, al igual que muchos del Estado decenas de familias comieron los tradicionales mucbilpollos.
La elaboración inició desde el pasado jueves con las muestras de altares en algunas escuelas del puerto, entre estas prácticamente de los niveles Medio y Superior que conservan parte de las tradiciones.
Pero hoy fue el día fuerte debido a que en muchos altares del municipio estuvieron presentes estas ofrendas para los difuntos, que son los tradicionales pibes, ofrenda que conserva la tradición de los ancestros.
En la panadería “La Fátima” con más de 80 años en el puerto, los pibes fueron cocidos en su horno de leña y terminó la actividad este sábado por la tarde.
Gonzalo Perera Ku, con dos décadas de encargado del horno de la mencionada panadería, dijo que funciona con leña y piedras que le dan un sabor especial a lo que se cuece.
Ahora comienza a enseñar el oficio a su sobrio Mario Martín Ku, el cual tiene cuatro años, apoyándolo como tahonero y ahora en el horno con los pibes.
Dijo que los primeros mucbilpollos comenzaron a llegar alrededor de las 20:00 horas del viernes y se hornearon más de 500 en dos turnos para el trabajo de la horneada que comenzó a calentarse desde las 18:00 horas y así se ha conservado.
Las familias aprovechan para la elaboración de su mucbilpollo. El costo de la horneada varía de acuerdo al tamaño de 15 a 40 pesos.
En el caso de los senectos que son clientes de este comercio, la horneada se les da por cortesía, por indicaciones de la propietaria, Silvia Anguas Morales de Crisanti, como parte de una tradición de varios años.
Venta de mucbilpollos en el puerto.
En las celebraciones dedicadas a los difuntos este viernes amaneció con olor a mucbilpollos, los cuales se comercializaron en diversos supermercados, en el mercado municipal y en las cocinas económicas.
La venta y elaboración en este día fue bastante. Los precios de los pibes varían en el puerto debido a que en los supermercados estaban entre 300 y 400 pesos.
Cristina Ordaz Jiménez elaboró unos 300 pibes los cuales se comercializaron entre los 350 y 370 pesos. La diferencia del precio está en el espelón y el relleno es de carne de cerdo y pollo.
Para hacer posible estas ventas comenzaron a trabajar unas 30 personas desde las 19:00 horas. Los pibes se llevaron a diversas panaderías del municipio, para que alrededor de las 08:00 horas comenzaran las entregas, todo bajo previo encargo debido a la fuerte inversión que se realiza para la elaboración.
Agregó que sus ventas las realiza cada año, muchos de los clientes son matrimonios jóvenes porque ambos trabajan.
En este caso prefieren la compra de los pibes debido a que por su trabajo no tienen la oportunidad de hacerlos en casa, como lo realizan de manera tradicional las familias.
En las oficinas congeladoras del puerto también comieron un pedazo de pib para los empleados que trabajan en las oficinas y desde luego los de las plantas.
En los supermercados los precios de los pibes previo encargo, se comercializaron entre los 350 a 400 pesos. En el caso del mercado el precio fue de 200 y 250 pesos.
En este caso los pibes llegan de la comisaría de Konchén e igualmente son negocios de familia.
(Julio Jiménez Mendoza)