El Dr. José Luis Andrade Torres, investigador titular de la Unidad de Recursos Naturales del CICY, especialista en fisiología vegetal y quien trabaja con plantas que no son de cultivo, dijo que debido al cambio climático ahora es más importante ver cómo funciona una planta en cualquier lugar, y que así como nos ayudan las plantas debemos aprender a ayudarlas.
Dijo también:
–Puede ser un laboratorio, puede ser un invernadero, puede ser directamente en el campo, en la selva. Ver cómo funciona y cómo cambia esta función por las diferentes cosas que ocurren: temperatura, lluvia, agua.
–Doctor, ¿por qué es importante eso?
–Porque realmente nosotros venimos de la naturaleza. Incluso nos sentimos mejor si vemos una planta en nuestra casa, en nuestro patio. Las plantas son algo que viene con nosotros y tienen que soportar diferentes cambios. Nosotros nos podemos meter a un aire acondicionado o tener un ventilador, las plantas no. Por eso tratar de comprender cómo funciona una planta podría decirnos mucho acerca incluso de nuestro confort, que no podríamos vivir si no tenemos, por ejemplo, un árbol en nuestro patio, y poder comprender cómo funciona, sería interesante para poder saber cómo ayudarlas. Así como nos ayudan las plantas, cómo ayudarlas es la función del hombre.
En general, la fisiología vegetal no es tomada por su importancia. En realidad si hablamos del cambio climático, por ejemplo, las plantas responden de una manera que precisamente es lo que necesitamos tratar, que la gente conozca lo que es la fisiología vegetal, y que haya más estudiantes que hagan trabajos sobre la fisiología vegetal.
Cambio climático
–¿Afecta mucho el cambio climático a la fisiología vegetal?
–Claro que sí. O sea, si nosotros tenemos que una planta responde a ciertas condiciones, de repente si hay menos agua o la temperatura aumenta, o hay demasiado viento, o viene una tormenta severa, pues hay una respuesta y las que más se adapten a esa respuesta son las que van a sobrevivir. El problema que tenemos ahora es precisamente eso: tratar de ver cómo responden para poder predecir qué puede ocurrir. Y hay que ver qué variedades podrían resistir a ciertas temperaturas más altas, menos altas.
–¿Y de eso ya se sabe lo suficiente?
–Pues México es un país diverso, se le dice mega diverso porque hay muchísimas especies, de las cuales, por ejemplo, del maíz hay muchas razas que están adaptadas para diferentes zonas. Pero también si cambia, si hay menos lluvias, si hay temperaturas más altas, todo esto implica que va a haber cambios en la fisiología.
Las plantas responden
–¿Las plantas tienen inteligencia?
–Como nosotros hablamos de inteligencia con cerebro y todo eso, no sabemos decir, pero las plantas responden. Y además hay una manera de responder muy amplia, digamos que una planta siempre está afuera, entonces puede responder desde temperaturas altas hasta temperaturas bajas, y los cambios estacionales es una manera de poder responder.
No le podemos llamar a eso inteligencia en el sentido del humano, pero sí podemos saber que están adaptadas a los cambios. El problema que tenemos es que, si nosotros hacemos cambios cada vez más dramáticos como seres humanos, ¿cómo se van a adaptar los cambios?
–¿Tienen emociones las plantas?
–Siempre podemos hablar de que pueden tener respuestas al ambiente. Es una respuesta de que cuando falta agua las hojas se estresan. Es una manera desde nuestro punto de vista de decir que hay tristeza en la planta, porque se cambió su ambiente.
Incluso yo siento que responden al estrés que sufren las otras plantas. Una vez que una planta se corta, liberan sustancias. Muchas veces si viene un herbívoro y empieza a morder unas hojas, se empiezan a liberar sustancias para avisar a las otras que produzcan otras sustancias para evitar que se las coman. Entonces todas esas sustancias volátiles, que las percibimos si las podemos oler, pueden llegar a otras plantas y entonces eso es decir, como anunciar, que tienen que prepararse para lo peor.
–No nos damos cuenta de que tal vez les hacemos mucho daño y las hacemos llorar.
–Yo creo que tenemos que pensar que sí, realmente estamos como anunciándoles que puede ocurrir algo. E incluso responden cuando uno les habla.
–¿Las plantas registran el dolor?
–Lo que registran son esos cambios que le estaba mencionando.
–Por ejemplo, ¿si las cortamos?
–Si la cortan, hay registro y hay liberación de sustancias para a su manera curarse.
Se curan automáticamente
–¿Podría ser que esté sintiendo el dolor?
–Eso podría ser una manera de curarse, podríamos pensar en el sentido humano que sí están sintiendo dolor, pero se curan automáticamente.
Pero también muchas veces las plantas lo que requieren es que se poden para volver a crecer. Muchos pastos que son comidos lo que hacen es volver a crecer. Si no existieran las plantas no existiéramos nosotros.
–Y la planta no tiene la posibilidad de podarse ella misma, ¿verdad?
–No, y es importante la poda para que pueda retoñar otra vez.
–Doctor, ¿quiere dar algún mensaje para los lectores?
–Una parte muy importante es que entendamos como sociedad que los estudios científicos que hacemos son bien importantes. Generalmente lo que se maneja en muchos aspectos del país son estudios que se hacen en otras partes, otras partes que no tienen sitios tan diversos como nosotros. Entonces nosotros mismos podemos tener esos conocimientos para poder aplicarlos y, ahora que hay cambio climático, tendríamos que tener más conocimiento, porque de alguna manera las plantas nos pueden anunciar muchas cosas, entonces es importante estudiarlas. Y yo creo que todos debemos saber que en México hace falta más apoyo para la ciencia.
La entrevista fue hecha en el marco del 2o. Congreso Mexicano de Fisiología Vegetal, que continúa hoy en el Jardín Botánico del CICY.
El Dr. José Luis Andrade Torres estudió su Doctorado en Fisiología Vegetal en la Universidad de California, en Los Angeles y la licenciatura en la UNAM.
(Roberto López Méndez)