Pilar Faller Menéndez
Voceadores y repartidores del periódico
Es de madrugada, acaba de salir la edición del periódico y aunque haya frío en esta época, salen a repartir sus periódicos, que muchos esperan con ansias para poder comenzar su día tomando una taza de café caliente, mientras se enteran del acontecer de las noticias, probablemente sea para muchos el mejor momento para comenzar el día, ya que muchos se sienten “desnudos” cuando salen de sus casas sin haber leído el periódico antes.
En la era en que vivimos, de periódicos que pueden leerse vía internet, nunca podrán sustituir el poder leer en papel las noticias. La forma de llevar las noticias a los ansiosos lectores no ha cambiado mucho, ya que después de armar las secciones del periódico, salen de madrugada los camiones que repartirán los periódicos a los voceadores, y harán llegar a los municipios las noticias del día. Los repartidores, también se alistan para llevar a los suscriptores sus ejemplares.
Los centros de reparto a los voceadores, arrancan un poco más tarde en los puestos o esquinas designados para su venta. Son un ejército de vendedores callejeros, que en muchas ocasiones han heredado sus puestos de sus padres. Ellos siguen una tradición que forma parte del paisaje de las mañanas, es una labor dedicada, sobre todo comprometida, un verdadero ejemplo de trabajo.
Ya no se usa gritar las noticias como antaño, sino que exhiben las atractivas portadas del periódico, lo cual es suficiente para que genere interés y los ejemplares se adquieran. Su jornada dura poco: de 5 a 10 de la mañana aproximadamente, ya que la prensa se agota pasada esa hora. Muchos de ellos ya tienen y conocen a sus clientes, y algunas veces les separan sus periódicos, si éstos están por agotarse.
Los suscriptores no tienen que tomarse el trabajo de buscar un puesto para adquirir su ejemplar porque saben que antes de que amanezca, ya contarán con su ejemplar, muchas veces todavía con las tintas frescas, y pueden disfrutar de su desayuno acompañados de su periódico. Esta costumbre sigue siendo sólida y se ha convertido en un ritual.
La actividad de reparto requiere de una destreza para manejar una motocicleta, ya que es necesario maniobrar muchas veces en zig-zag para poder con su memoria prodigiosa, no olvidar a ningún suscriptor de su ruta, también deben sortear baches, perros que los persiguen y vehículos que muchas veces por imprudencia los atropellan. Llevan a los costados de sus motocicletas una especie de sacos, donde llevan los ejemplares que habrán de lanzar con tino en cada casa.
Durante esta época de heladez que estamos viviendo, seguramente sus rostros sientan los embates del clima, afortunadamente vivimos en un lugar donde la temperatura matutina es agradable. Es justo agradecer a estos portadores de noticias, el esfuerzo que realizan diariamente, sin importar si es domingo o día feriado, siempre cumplen con su trabajo, y son fieles a sus suscriptores.
Los voceadores y los repartidores de periódicos son los héroes matutinos de los periódicos, son quienes tienen la tarea de repartir el trabajo que se ha realizado desde la redacción y las rotativas durante parte de la tarde y altas horas de la noche, y fungen como enlace de este esfuerzo con los lectores.
A ellos, que muchas veces no sabemos sus nombres, vaya un agradecimiento y un deseo de que con sus familias tengan unas felices fiestas. ¡Gracias por cada mañana de noticias!