Las entidades financieras que ofrecen apoyos a las micro empresas son de suma importancia para hacer crecer y fortalecer sus actividades, especialmente en la zona rural, ya que normalmente por su tamaño y condiciones, esas pequeñas empresas no pueden acceder a créditos bancarios, manifestó ayer el director de la Facultad de Contaduría de la Universidad Autónoma de Yucatán, Aureliano Martínez Castillo, durante la ceremonia de clausura de la XIII edición del programa “Boulder MFT en español”.
Recordó que este programa, en el que participaron expertos financieros de 14 países, se desarrolló durante varios días en esta ciudad y tuvo como objetivo fortalecer los conocimientos en gestión financiera a pequeños bancos, a fin de mejorar el desempeño en gestión institucional, identificar los problemas y áreas de oportunidad de cada región.
A pesar de la importancia económica de las zonas rurales –continuó—, sufren generalmente de una marcada carencia de servicios financieros, ya que la oferta de financiamiento para campesinos y empresas agrarias y no agrarias, faltan por completo o bien no corresponden a sus necesidades.
Tecnologías de crédito
—Los sectores financieros micro rurales presentan un modelo de demanda muy diferente al sector financiero urbano, se necesitan créditos a mediano y a largo plazos, los préstamos son arriesgados y además, a menudo van unidos a costos de transacción mucho más altos, agregó.
Todo ello –observó—, requiere tecnologías de crédito que son normalmente más exigentes que los créditos a corto plazo, así, un reto importante junto a la fijación de intereses en la aprobación de riesgos de los créditos lo constituye la elección de los proveedores de financiamiento.
Martínez Castillo, quien acudió en representación del rector de la UADY, José de Jesús Williams, aseveró que el desarrollo de sistemas financieros en ese sector se ve confrontado con una serie de retos económicos, entre los que se encuentran la menor densidad de población, la escasa actividad económica, los altos costos de transacción a causa de la falta de infraestructura, como carretas, telecomunicaciones o de la insuficiencia de registro de población y de propiedad.
También los riesgos agrícolas como pueden ser la irregularidad pluviométrica, plagas y fluctuaciones de los precios.
Resaltó que por ello se requiere del poyo a instituciones y la creación de estructuras financieras activas en el medio rural, económicamente viables y orientadas a la demanda, entre ellas grupos de ahorro o de créditos, cooperativas, alianzas entre las instituciones financieras informales, semiformales y formales.
En la ceremonia de clausura se contó con la participación de Robert Christen, Director de Boulder Institute of Microfinance.
(Rafael Mis Cobá)