Yucatán

Cristóbal León Campos

Hablar de la cultura maya es hablar sobre la expresión viva de un pueblo que ha perdurado durante siglos generando manifestaciones simbólicas y rituales que, a la fecha, nos permiten comprender sus interpretaciones sobre la vida, la muerte, la naturaleza y demás aspectos de la cotidianidad, la cultura maya es componente esencial del Yucatán del siglo XXI.

La cultura maya ha pasado por etapas históricas que marcaron sus concepciones del mundo, la noche de la dominación colonial acentuó una serie de prácticas culturales que durante siglos fueron configurándose, la resistencia y persistencia se convirtieron en elementos cotidianos que fueron eje de interpretaciones cambiantes de lo social, económico y político, pero especialmente de lo religioso y cosmogónico, la esencia de la cultura maya reside en la memoria que se expresa de forma material en objetos, documentos y demás patrimonio, o de manera inmaterial mediante la oralidad, y sobre todo la lengua, elementos donde actualmente se deposita la concepción del mundo, de la naturaleza y de la vida.

Los conocimientos, su transmisión, el saber y los valores, dan forma a la cosmovisión del mundo que los mayas actuales manifiestan, su conservación se debe a la pervivencia de la memoria histórica mediante la oralidad. Lo complejo de su organización como sociedad se refleja en el pensamiento, el cual concibe al universo regido por los dioses y descrito a través de una historia sagrada. Los mayas entienden los sucesos del mundo como un acercamiento sagrado al origen, a la existencia en la Tierra, así como a la supervivencia. El mundo en que los mayas viven se ve reflejado en la cotidianidad, en los ritos, las ceremonias y las creencias que recrean el principio y el final de los tiempos.

Acercarnos a la cotidianidad de los mayas peninsulares posibilita una reflexión sobre la cosmovisión y la identidad a través de la ritualidad, los símbolos y la oralidad relacionada a la naturaleza, y a todo aquello que forma la profunda fusión del hombre-naturaleza. Hoy, en pleno siglo XXI, la cosmovisión maya se manifiesta viva, vital y en constante reafirmación pero también en permanente cambio, acercarnos a ella, sistematizarla para el análisis, para su conocimiento, sería una importante aportación a la tradición de investigación que en Yucatán se realiza desde muchos años atrás.

Las manifestaciones rituales, simbólicas, cotidianas, que actualmente se practican en el territorio peninsular maya convergen en un todo cosmogónico, percepción que permite comprender cómo se dinamiza y transforma la cultura. Adentrarnos a esas expresiones proporcionará información valiosa poco utilizada en las investigaciones tradicionales sobre la cultura maya y ayuda a explicar y comprender la dinámica de los rituales, social y cotidiana, en el marco de las concepciones cosmogónicas mayas, recogiendo el vital papel de la oralidad y la memoria.

El acercamiento al mundo cosmogónico de los mayas maceualo’ob actuales, nos inicia en un recorrido por el mundo de las expresiones sincréticas más sensibles de las sociedades originarias mesoamericanas. La ritualidad que se practica en la región maya peninsular es todo un cúmulo de símbolos que denota espacio sagrado y fe, adicionada con un toque de respeto y fervor hacia las deidades sagradas del universo. Valorar la riqueza patrimonial de Yucatán es también estudiar, comprender, divulgar y salvaguardar las cosmovisión de la cultura maya.

*Integrante del Colectivo Disyuntivas