Yucatán

Por segundo día consecutivo, ejidatarios de Motul, Cansahcab y Sinanché bloquearon la entrada a las instalaciones del Tribunal Agrario y demandaron el cese del magistrado titular, Antonio Luis Betancourt, a quien acusan de ser cómplice de varias irregularidades.

En la protesta que se llevó a cabo en las instalaciones del Tribunal Agrario, los ejidatarios bloquearon el paso a las oficinas y aseguraron que no se retirarían hasta que el magistrado sea cesado de su cargo.

Sin embargo, también llegó otro grupo conformado por ejidatarios de Motul, quienes exigían que el Tribunal se abriera para que se llevaran a cabo las audiencias programadas.

El ambiente se tornaba tenso por ratos debido al enfrentamiento entre ambos grupos. Por un lado, estaban los que pedían el cese del magistrado, encabezados por el comisario ejidal Jorge Alonso Chuc y el asesor Julio César Balam; por el otro, los del grupo que demandaban que se liberara el Tribunal Agrario y que se llevaran a cabo las audiencias programadas, pero éstas se suspendieron debido a las protestas.

El centro de la discordia radicaba en que el pasado lunes se tenía que llevar a cabo una audiencia para emitir una sentencia a las demandas de un grupo de ejidatarios que piden que no se reconozca a Jorge Alonso Chuc como comisario ejidal, pues dicen que se reeligió y que es ilegal.

Señalaron que quienes tienen tomado el Tribunal Agrario lo hicieron para impedir que se llevara a cabo la audiencia en la que se emitiría sentencia y que, por ello, están pidiendo que se cese el magistrado.

Demandaban en este sentido que se abriera el Tribunal, que se llevara a cabo la audiencia respectiva y que se emitiera una sentencia sobre las dos demandas que se tienen interpuestas sobre este caso.

Acarreados

El grupo que tomó las instalaciones, por su parte, señala que sus opositores están pagados por Rafael Acosta Solís y que son acarreados. Además, sostuvieron que el comisario es legítimo, pues cuenta con un amparo otorgado el 15 de mayo pasado que lo ratifica en el cargo.

Así, a ratos los ejidatarios de ambos grupos se enfrentaron a gritos e insultos hasta que por allá de las 9.20 de la mañana el magistrado llegó acompañado por elementos de la Secretaría de Seguridad Pública, quienes le abrieron paso hacia las oficinas y detrás de él entraron varios empleados más del Tribunal Agrario.

Desde luego no faltaron los gritos contra el magistrado a quien tachaban de “¡corrupto!”, “¡vendido!”; también hubo en esta ocasión gritos de apoyo para él, como “Nosotros lo apoyamos”, “Que se abra el Tribunal y lo dejen trabajar”.

Queja

Los opositores al magistrado dijeron que ya pusieron una queja en su contra en el Tribunal Agrario nacional y que no se moverán hasta que llegue una resolución de la Ciudad de México.

Al magistrado lo acusaron además de estar coludido con especuladores de tierras, como Rafael Acosta Solís, y de ser cómplice de proyectos eólicos que son perjudiciales para los ejidatarios de localidades como Cansahcab y Sinanché, además de tomar medidas arbitrarias contra el comisario ejidal de Motul, Jorge Alonso Chuc, a quien le dictó medidas precautorias queriéndolo quitar el cargo, pero no pudo porque el ejidatario ganó un amparo. Entre gritos y enfrentamientos verbales pasaron los minutos hasta que una comisión de ambos bandos fue llamada a dialogar al interior del Tribunal, donde según averiguamos no se lograron acuerdos satisfactorios y hasta la tarde los ejidatarios seguían bloqueando la entrada a las instalaciones, aunque el edificio permanecía bajo resguardo de la Secretaría de Seguridad Pública.

(David Rico)