MAXCANU, Yucatán, 25 de julio.- Rateros de este municipio, que siguen libres a pesar de estar plenamente identificados por las propias víctimas, ahora están desvalijando una casona que antiguamente fue restaurante en la calle 15 Camino Real y Periférico, mientras que la policía se duerme en sus laureles.
Son 13 puertas de herrería las que ya se llevaron los delincuentes en dos meses de este predio, que es propiedad de la familia Rodríguez Uc, sin que la Policía Municipal ni de chiripa haya dado un golpe a los malandrines y los haya capturado, porque siguen operando en la impunidad.
De acuerdo a la información recabada en el lugar de los robos, por cuestiones de salud de la propia familia se ha tenido que alejar de esta propiedad, donde ya se pueden ver incluso que algunas otras puertas están a punto de ser arrancadas, porque ya las trozaron y dejaron listas para llevárselas.
“Debido a que es un lugar donde no hay más viviendas, esto es aprovechado por los rateros, además de que ni vigilancia policial hay ni por esta zona del pueblo ni por ningún lado”, dijeron los afectados.
En la Fiscalía General con sede en esta localidad, ha trascendido por parte de las mismas autoridades, que los ladrones siguen sueltos porque los afectados denuncian pero ya no le dan seguimiento a su proceso, es decir, se les solicitan algunos trámites y ya no regresan, o bien prefieren llegar a arreglos con las familias de los malandrines y una vez que les regresan el producto de los robos dejan todo a medias.
Por esta razón los ladrones, que ya se han metido lo mismo a las casas y se han apoderado de joyas, dinero y otros objetos de valor, siguen libres tranquilamente, acechando donde pueden seguir robando, tal como lo están haciendo en esta propiedad, mientras que los agentes municipales se ven imposibilitados, pues los traen en otras tareas que no son precisamente las de cuidar a la ciudadanía y su patrimonio.
(Texto y Fotos: José Luis Díaz Pérez)