SISAL, Hunucmá, Yucatán, 25 de agosto.- Este domingo, considerado el último del período vacacional, se realizó el tradicional bordeo marino en honor al Cristo Negro.
Esta añeja tradición que ya cumplió más de medio siglo de celebrarse, es considerada uno de los paseos marinos mayor concurridos en el Estado de Yucatán.
Sin embargo, este año fue notoria la disminución de lanchas ribereñas participantes. Lo mismo que los adornos con globos y papeles de colores, con que las adornaban, puede decirse que casi ninguna estuvo adornada.
Al disminuir el número de naves participantes, mucha gente que viene de la cabecera municipal, y poblaciones vecinas, e incluso del interior de la República, tuvo que quedarse a la orilla del mar, ante la imposibilidad de unirse al bordeo marino.
Después de terminar la misa, que ofició el Pbro. Francisco Kantún Medina, responsable de la Rectoría de San José, de este pueblo costero, que se celebró en el muelle de pescadores, inició la procesión para llevar a la orilla del mar la venerada imagen.
En ese lugar, como lo ha hecho desde hace 34 años, la familia Zamora Novelo, que integra Don Joel Zamora Gómez, y su esposa Rita Guadalupe Novelo Novelo, con uno de sus hijos, Joel Zamora Novelo, ya tenían lista su embarcación de nombre “Santa Rita”, donde acomodan al Cristo Negro para su paseo en el mar.
“Durante más de tres décadas, nuestra familia, de manera gustosa, otorga la lancha Santa Rita, donde pasean al Cristo. Esta tradición la inició el abuelo de la familia, Don José Emiliano Novelo Esquivel, con la lancha Yaveh, junto con su hijo Fernando Novelo Ceballos, hermano de Don Pedro, antiguo custodio de esta centenaria tradición, quien lamentablemente falleció hace algunos meses.
“Que el Señor de Sisal (tal como se le conoce también) los acompañe siempre en sus tareas en el mar, y proteja a sus familias, pues siempre están en constante riesgo”, dijo a los pescadores y vecinos de esta comunidad costera, el Padre “Chico”, como llaman al Pbro. Kantún Medina.
El paseo por mar, que se realiza en ambos costados del litoral, dividido por el muelle de pescadores, dura aproximadamente tres horas. Comienza minutos después de las 8 de la mañana, al finalizar el ejercicio religioso, y culmina antes de las 11.
Una lancha rápida de la Capitanía de Puerto, vigiló de cerca el bordeo marino, para dar protección a las lanchas participantes. Responsables de esta tradición, criticaron que todavía, muchos patrones de lanchas, no respeten el paso de la lancha “Santa Rita”, donde está el Cristo Negro, pues se atraviesan de manera constante.
Ayer domingo hubo un buen clima, comenzó con un soleado amanecer, y así transcurrió durante todo el día, aunque con altas temperaturas. El bordeo marino transcurrió tranquilo y con normalidad, afortunadamente no hubo ningún incidente.
(Ramón Reyna Fernández)