Yucatán

El apoyo directo al pescador de 7,200 pesos del programa federal Bienpesca se comenzó a entregar ayer en puerto Progreso a 300 beneficiarios y se beneficiará a un total de mil personas este año, informó Raúl Elenes Angulo, Comisionado Nacional de Pesca de la Sader, durante su segunda visita a Yucatán.

En un evento calificado por el propio Comisionado como “forzado”, realizado en el Auditorio Morelos de este puerto, inició ayer la entrega de este apoyo directo a 300 beneficiarios, que fueron citados desde las 10 de la mañana y que empezaron a recibir sus certificados después de la una y media de la tarde, debido a la mala organización.

De acuerdo con el Comisionado, el total de beneficiarios será de mil personas este año en el Estado, el presupuesto total es de 7 millones de pesos y dijo que aumentará el próximo año para llegar a más pescadores.

POR ESTO! ha informado que en la captura pesquera hay más de 12 mil pescadores, que es a los que el Gobierno del Estado apoya en la veda del mero, durante dos meses.

Walter Hubar Zamudio, director general de Organización y Fomento de Conapesca, explicó a los asistentes lo que significa el apoyo Bienpesca y los cambios que ha tenido, ya que antes era el llamado ProPesca.

Se acabaron las cuotas

“El Bienpesca es un reconocimiento que hace el Gobierno Federal a la actividad pesquera. Es una forma de decirles que sabemos que están presentes y que la pesca requiere que se le reconozca y se entienda lo que es.

“El Bienpesca no necesita cursos de actualización o capacitación, con la información que tienen en sus manos es suficiente y es para todos, todos pueden acceder su solicitud, hoy todos tienen acceso. Se acabaron las cuotas”, dijo.

Pidió a los pescadores que “no desesperen”, porque si bien no salen en esta oportunidad, se revisará la situación de las cooperativas para ver que los socios sean los vigentes.

Los beneficiarios reciben una constancia a su nombre, que la llevan a Telecomm a cobrar por 7,200 pesos, cuando antes se distribuía a través de las cooperativas.

“Entregamos 4 pequeñas llaves para darle primero a los que nunca han recibido, luego para el que ya recibió, espere 3 años para volver a recibir y dar prioridad a las zonas vulnerables. El 50 por ciento de los que están aquí nunca han recibido el apoyo”, dijo.

Y comentó que, en el tema del retraso de actualización de permisos están en pausa, porque están revisando uno a uno.

Hace 6 meses

El Comisionado Nacional recordó que hace 6 meses, cuando vino por primera vez a Yucatán y se encontró con el sector pesquero (en febrero), “el Gobernador me invitó a la entrega de apoyos de la administración anterior y dije públicamente que no quería saludar con sombrero ajeno y que regresaría. Aquí estamos. Hicimos una primera visita para constatar que es un sector muy abandonado y venimos con este programa que es muy noble. Era el ProPesca, pero le hicimos un rediseño”, dijo.

Explicó que no es un programa para premiar o castigar la producción. Ahora es un apoyo incondicional y no se piden comprobantes del gasto del dinero.

Dijo que los beneficiarios son de Buctzotz, Celestún, Dzilam de Bravo, Dzilam González, Dzidzantún, Yobaín, Hunucmá, Kinchil, Progreso, Sinanché, entre otros.

“Forzado” y desorganizado

El acto de entrega de apoyos en el auditorio tenía “acalorados” a los beneficiarios por la falla de ventiladores y la mala organización.

Cuando Oscar Brito, representante de Conapesca en Yucatán, pidió aplausos para el presidium, el Comisionado expresó que el “evento está muy forzado” a quien representa al Gobierno Federal en el Estado y le acompañaba en el presidium.

El ambiente se percibía tenso, denso y se dejaba ver la mala organización, al grado que durante la entrega de constancias simbólicas, los beneficiarios recibieron certificados que no correspondían a su nombre, pero ante la premura y lograr la foto terminaron entregando nombres que no eran.

De acuerdo con los asistentes, el evento se comenzó a organizar con una semana de anticipación, pero aún así el propio Comisionado Nacional no pudo evitar dar “golpecitos” con sus nudillos en la mesa y calificar el evento de forzado.

(Verónica Martínez)