Aun fuera de temporada vacacional, Progreso tiene atractivos que ofrecer a los visitantes, como un recorrido vespertino o nocturno por el Muelle de Chocolate o el Malecón Internacional.
Luego de su remodelación, en el Muelle de Chocolate se colocaron sillas y mesas donde cualquier persona puede disfrutar del atardecer o bien cenar junto al mar, ya sea que lleve sus propios alimentos o los adquiera en los locales ahí establecidos.
Por su parte, en el Malecón Internacional, con su nueva fisonomía y atractivos, invita a tomar fotografías, caminar o pasar allí un largo rato con amigos, familiares o en pareja.
En el recorrido de aproximadamente dos kilómetros hay juegos para niños, una ballena hecha de hierro para colectar residuos plásticos, un mural, el jardín de la lectura, un carrusel que funciona por las tardes, un barco encallado, un barco pirata y la figura de un tiburón martillo.
También hay canchas de fútbol y voleibol y un restaurante de perros calientes.
Más al Poniente se encuentran la pirámide de tambores, un set de flamencos, un espacio para colgar hamacas en lo que es el playón, área de juegos para niños, el pabellón del mar, así como la osamenta de la ballena aleta azul que recaló en la Terminal Remota en febrero del 2016 y que se encuentra ahora la altura de la calle 104.
Esqueleto de ballena
El esqueleto de la ballena mide 15 metros de largo; el cetáceo estuvo sepultado en arena 11 meses; el 20 de enero de 2017 se sacó el esqueleto y se le trasladó a las instalaciones de la Facultad de Veterinaria de la UADY, donde la osamenta se lavó y curó, se retiraron los tejidos y sellaron los poros para evitar su deterioro natural.
Para su exhibición se le colocó impermeabilizante especial de modo tal que los elementos como el salitre y la humedad no dañen la osamenta.
La osamenta consta de 58 vértebras, cada vértebra lleva dos discos (en total 116 discos), 14 pares de costillas, dos aletas pectorales (cada una de las cuales tiene 46 huesos) y dos mandíbulas de 3.5 metros.
Si el visitante desea recorrer en auto a un costado del malecón, se puede hacer en el camino de arena paralelo, el cual es amplio y hay espacio para estacionar y dejar los automóviles.
En el Malecón Internacional, a diferencia del malecón tradicional, no hay tanto amontonamiento, también hay espacio para que circulen autos en doble sentido y en las cercanías hay algunos restaurantes, tiendas y cafeterías que recién abrieron sus puertas.
(José Manrique)