COSTA CENTRO-ORIENTE.– A un mes de que arrancó la temporada de pulpo en Yucatán, la segunda pesquería más importante por su impacto social, en los Puertos de Abrigo de Telchac, San Crisanto y Chabihau el panorama es desolador: son pocos los pescadores que salen a la captura porque escasea el octópodo.
De acuerdo con los hombres de mar de embarcaciones ribereñas, la temporada de pulpo no ha mejorado, ya que las capturas siguen bajas y, aunque el precio llegó a 75 pesos en planta, para el pescador es de 65 pesos y, en el caso de tripulantes, de 35 pesos el kilo, lo que ha desanimado la salida.
En los puertos es común ver numerosos embarcaciones amarradas.
Entre los compradores de cooperativas o intermediarios lo mejor es salir al palangre, que es el arte de pesca para el mero, la rubia o el canané, porque el pulpo está mal pagado.
En algunas cooperativas apenas sale una lancha al pulpo y regresa con entre 5 y 8 kilos: “No es redituable ni para los gastos, la temporada está siendo la peor. La gente de otros pueblos que llega en estas fechas no viene, porque no hay trabajo”, dijeron.
Herbé Cetina Marrufo, José Cetina Luna, José Cortés Chuc, Ismael Cetina Chan y Amílcar Cetina Bass, pescadores de Telchac Puerto, mostraron las embarcaciones amarradas, pero listas con las jimbas para ir por el pulpo.
“Uy no, el pulpo no, no hay salida, está mejor irse al palangre; el kilo del mero rojo grande está en 160 y el mediano en 120 pesos. Pulpo no hay y está mal pagado, por eso hay tantas embarcaciones amarradas.
Falta de incentivos
“Un 10 por ciento de toda la flota del puerto estará yendo al pulpo. No es nada comparado con lo de años pasados, cuando la gente de otros pueblos, como Motul o Telchac Pueblo, vienen a trabajar el pulpo; ahorita se quedan en sus trabajos del campo, de albañil, de lo que hagan en sus pueblos. Bajaban a trabajar al pulpo para ganarse unos 500 ó 600 pesos al día, pero ahorita no hay nada de eso, está muy difícil la situación”, reiteraron.
En el Puerto de Abrigo de Telchac las embarcaciones están listas para zarpar con jimbas y alijos, pero no lo hacen por falta de incentivos.
POR ESTO! publicó el 2 de agosto que la temporada de pulpo arrancaba con un panorama difícil, ya que la captura fue baja el primer día: hubo quienes lograron solamente un pulpo y el precio arrancó en 40 pesos kilo.
Una semana después se detectó que el pulpo estaba hacia el Poniente y el precio mejoró sensiblemente.
Después de 15 días el precio al pescador pasó de 45 pesos el kilo a 70 pesos, sobre todo el Poniente, donde las capturas eran en promedio de 30 a 50 kilos, luego que los primeros viajes fueron de menos de 5 kilos.
Sin embargo, la mejora en el precio no fue “pareja” en todos los puertos, ya que en Chuburná el alza fue de 10 pesos: les pagaban 55 pesos.
Los hombres de mar relataron a POR ESTO! que la temporada abrió en 45 pesos el kilo.
Ayer, en esta zona del Centro-Poniente, el precio al pescador era de 65 pesos el kilo y 35 para los que van en embarcaciones mayores, los tripulantes.
En San Crisanto y Chabihau la situación es similar.
Endeudados
Los pocos que salen al pulpo regresan con entre 5 y 10 kilos, lo que les deja endeudados.
“A los ribereños que van un día les va muy mal, por eso hay tanta lancha parada, porque regresan con 5 ó 10 kilos. Nosotros vamos a viajes un poco más largos, de 4 días, pero hay muy pocos barcos que están saliendo; por eso están amarrados, se están yendo los pescadores a Progreso para trabajar allá y recibir anticipos”, dijeron Jesús May Coot, Máximo Palma Cervantes y Lorenzo Chalé Cauich.
Los pescadores, que regresaron el viernes, se preparaban para zarpar ayer mismo y volver a probar suerte hacia el Oriente.
“Aquí cuando mucho el 5 por ciento de la flota está yendo al pulpo”, señalaron.
Este año la temporada del pulpo en el Estado es de baja captura y bajo precio, aunque se espera que mejore.
(Verónica Martínez)