Yucatán

Un acto simbólico que dignifica a una gran mujer yucateca

Effy Luz Vázquez López

Estoy de regreso a mi casa de trabajo, después de asistir a un acto de reconocimiento histórico, a través de la develación de una placa conmemorativa a la memoria de la maestra Beatriz Peniche Barrera, quien, como otras destacadas mujeres de su generación, pugnó por los derechos de la mujer, por el reconocimiento de su participación en la vida socio-política de su época, con el derecho al voto y también a ser votadas para algún puesto público, desde el cual pudieran servir a nuestro querido estado en su proceso de desarrollo económico y cultural-social.

Poeta y escritora de un talento innato, plasmó en sentidos versos su admiración y cariño por nuestra patria chica y, en general, sus artículos periodísticos en diversas publicaciones reiteraban esa necesidad afectiva de una profesionista de la educación, ansiosa de compartir sus saberes con jóvenes mujeres yucatecas que comenzaban también a sentir el llamado de la participación social, cultural y política en nuestro solar nativo.

Este sencillo pero significativo y digno acto tuvo lugar en el Centro Cultural ProHispen, que dirige esa incansable y bella señora, amiga del arte en todas sus manifestaciones, que es Margarita Díaz Rubio, la cual nos honra con su amistad y reconocimiento a la Casa de la Historia de la Educación de Yucatán, institución filial que le sigue los pasos y la acompañará siempre en todas sus actividades y proyectos culturales.

Gracias Margarita por habernos hecho pasar una grata mañana, a la vez que recordar y reconocer, una vez más, el valor intrínseco y el talento de una digna mujer yucateca en este año 2020, conmemorativo de las mujeres.

*Coordinadora General de la Casa de la Historia de la Educación de Yucatán