Por el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, se recorrió las calles del puerto y se entrevistó a mujeres que declararon haber sido víctimas de agresiones de parte de sus parejas, quienes mencionan que las autoridades de la Fiscalía han sido rebasadas y otras dicen que han sido víctimas de la violencia física y psicológica, que les marcó la vida.
La abandonaron
Un caso de violencia contra la mujer nos revela Ernestina H. T., quien dice que por única vez compartirá este caso de su vida privada, debido a que a diario lucha para sacar adelante a sus hijas después de ser abandonada por su pareja sentimental que la golpeaba, no le daba dinero para sus alimentos, además de haber pasado más de una década que el padre de sus hijas, ambas menores de edad, no les pasa manutención a pesar de la demanda que interpuso ante la Fiscalía de este municipio.
Agregó que no le gusta tocar esta etapa de su vida pero accede a mencionar su problema debido a que con el fruto de su trabajo en una lonchería trabaja a diario para darle alimentación y educación a sus hijas a las cuales ama, sin que las autoridades competentes que han sido rebasadas le ofrezcan el apoyo, conforme a ley, para que su familia pueda tener dinero para la educación estando en medio de un futuro incierto.
Después de una mala vida de pleitos y golpes su pareja dejó la casa para irse con otra mujer, dejándola en el abandono, “pero mal que mal con mi trabajo estamos saliendo adelante, pero lamentablemente mi expareja me ha dejado todo el cargo de la renta de la casa, alimentación y educación de mis hijas”, externó.
“Acudir a las autoridades es simplemente perder el tiempo son pasadías, gastos en pasajes, acudir a la Fiscalía y tengo que trabajar o sigo con mi caso archivado, entonces prefiero trabajar para comer junto con mis hijas, seguramente mi caso no es único en el puerto, sus comisarías, para nada dudo que haya varias mujeres que vivan situaciones similares a la mía pero al menos me liberé de mi verdugo.
Un esposo celoso y posesivo
En el caso de Mayra A. R., a sus 4 décadas, asegura haber sido víctima de agresiones físicas, verbales y económicas de su expareja sentimental, con quien tuvo una relación tormentosa, “afortunadamente he logrado superar todo, ahora vivo de mi trabajo, pero sin la presión de un hombre enfermo de celos”.
“Concluí la primaria y después mi pareja sentimental por más de 10 años se ponía muy celoso cuando tomaba, primero comenzaba a injuriarme y me golpeaba, después vinieron las reconciliaciones y las promesas de no volver a dañarme físicamente y darme dinero”, mencionó.
“Tristemente esto no sucedió, las agresiones continuaron, la vergüenza de que mis vecinos se enteraran que constantemente habían pleitos en casa, la falta de dinero del celoso hombre que prácticamente me tenía encerrada, no me dejaba ir ni a la tienda sola, si miraba a alguien al llegar a casa era pleito, no me dejaba ponerme faldas, hacía que me vistiera con ropas que no eran de mi agrado, que me pintara el cabello”, continuó.
“Hasta que un día me di valor terminando esta relación llena de temores, desde luego fue difícil tomar esta decisión pero ahora vivo de mi trabajo y desde luego que ya no le guardo rencor, no sé qué fue de su vida pero espero que haya cambiado o bien si tiene otra pareja, hoy tengo tranquilidad que aunque tengo que sobarme el lomo limpiando barcos en el puerto de Yucalpetén, definitivamente mi tranquilidad no tiene precio!, acotó.
Fue golpeada en su infancia
Ana Rosa M. G., dice que desde su perspectiva hay muchas mujeres que han sido víctima de hechos violentos en alguna etapa de su vida.
“En mi caso en mi infancia mi padre me golpeaba debido a que presuntamente me portaba mal, por no hacer mis tareas o quejas de maestros, pero en fin eso es violencia que deja huella, aunque en aquellos años era niña en mi mente aún tengo estas imágenes de los castigos que me propinaban en esta etapa de mi vida”.
“En este Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer les recomiendo a los padres que eviten golpear a sus hijos o insultarlos, debido a que aunque no parezca, hoy lo entiendo, dejan daño en la vida de los pequeños que en realidad sí se olvidan pero son heridas que siempre duelen”, relató.
“Que hablen con éstos que les den valores, pero que antes de levantarles la mano lo piensen en varias ocasiones y mejor encausarlos al bien que llegar a la violencia”, finalizó.
Se repetirá y cada vez será peor
Daniela M. R., señala que con golpes no se arregla nada y la violencia contra las mujeres desde que recibes el primer golpe acompañado de injurias, seguramente vendrán más, pero cuando estás en este lugar no te das cuenta, sobre todo si amas a tu pareja, le perdonas todo pero hay hombres que les gusta golpear mujeres y tal parece que también hay mujeres que disfrutan recibir los golpes, pero si no estás en estos casos creo que lo mejor es romper tu relación”, opinó.
Por Julio Jiménez Mendoza