El tamiz neonatal o metabólico es una prueba de laboratorio que se realiza a todos los recién nacidos, idealmente, entre el tercer y quinto día de vida, pero si por alguna razón no se realiza durante esos días, puede llevarse a cabo en el primer mes de vida, mencionó la coordinadora de Salud Pública, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Yucatán, Mirna López Gutiérrez.
Es importante realizar esta prueba ya que revela enfermedades que de alguna forma pudieran pasar desapercibidas, y la detección oportuna ayuda a dar tratamiento adecuado en los primeros 30 días de vida, para evitar secuelas, y el recién nacido tenga un desarrollo normal.
“Al salir del hospital, entre el tercer y quinto día de nacido, el menor debe ser llevado a su Unidad Médica Familiar (UMF), a través del módulo de PrevenIMSS, la enfermera en turno será quien tome la muestra.
Esta se toma mediante una punción en el talón y se llenan unos círculos en un papel filtro, que será enviado a los Laboratorios de Enfermedades Metabólicas Congénitas, donde se procede a realizar pruebas de detección de posibles enfermedades; lo ideal es tener los resultados antes de una semana para estar en posibilidades de enviarlos a pediatría y prevenir secuelas de una enfermedad en los casos probables”, explicó López Gutiérrez.
Al año, el IMSS en Yucatán realiza en promedio 11 mil pruebas de tamizaje a recién nacidos, de las cuales alrededor de 60 llegan a ser casos probables y sólo 10 aproximadamente confirman alguna enfermedad metabólica.
Para finalizar, invitó a madres y padres de familia de bebés recién nacidos o próximos a nacer a informarse sobre esta prueba que es muy sencilla, no deja secuelas en el bebé y brinda múltiples beneficios de detección y tratamiento oportuno. (Boletín)