Yucatán

'Ya empacó”: ya comió (yucatequismos)

Roldán Peniche Barrera

Creo que un crecido número de veces he mencionado los incontables sinónimos del verbo “comer”.

Y aunque los hay importados del centro del país y de algunos otros Estados, y aún de países extranjeros, nosotros los yucatecos, siempre imaginativos, nos creamos los nuestros propios, algunos verdaderamente festivos, ingeniosos, chispeantes, otros ligeramente forzados y no faltan algunos tontos, baratos, surgidos de gente sin un poco de iniciativa o de gracia que enseguida nos invita a reír, a sonreír si se quiere ser discreto, o (hipócrita) o lanzar la carcajada imitada al pronto por los demás convidados sea bien a una fiesta, a un cumpleaños, o bautizo o ciertas nupcias o sencillamente a una barra de cantina o de café (más del primero), donde no sólo brotan los sinónimos originales sino que éstos dan inspiración a otros comensales alegres a imitarlos.

Sólo por citar uno, digamos el muy simpático de “empacar”, voz que al parecer nada tiene que ver con el verbo “comer” pero que los yucatecos hemos adoptado y sostenido a través de años y años. Se dice que desde los tiempos del grabador Picheta y años más adelante, por el “vate” (o los “vates”) Pichorra y Correa, en todas las cantinas de la ciudad se decía y repetía ad libitum.

Veamos un ejemplo:

Pito, el “betuno” (que nos valga el neologismo) chofer de color de la cera del inolvidable Dr. Peniche, llega al expendio del viejo D. Sera por su diario desayuno de sándwich de jamón y queso y exige:

-¡Don Sera! Ya sae porqué estoy aquí.

-Creo saberlo, pero ¿ya empacaste o no lo has hecho?

-¿Empacar pa’ qué? -pregunta Pito- ¿pues voy de viaje?

-No seas bruto: que si ya comiste…

-Claro que no: si por eso estoy en tu corralón…

-¡Desgraciado boxbak. ¡Que si ya comiste! ¡Píntate de mi tienda antes de que te empaque y te mande a “empacar” a la más vieja de tu casa…!

¡Cuidado con los triglicéridos!

También debe reemplazar las grasas saturadas por grasas saludables como el aceite de oliva o de canola y en lugar de carnes rojas debe consumir pescado rico en omega 3 como el atún y el salmón.

Si tiene hipertrigliceridemia reduzca su consumo de calorías, ya que las calorías adicionales se convierten en triglicéridos, está comprobado que al bajar las calorías, bajan los triglicéridos.

Evite los carbohidratos simples como el azúcar refinada, los refrescos embotellados y las harinas ya que podrían incrementar los triglicéridos.

Consuma azúcar baja en calorías y no abuse en el consumo de papas, arroz, frijol, etc.

Limite su consumo de frutas al igual que el pan de caja y el cátsup en tanto logra bajar sus niveles de triglicéridos para así evitar dañar sus arterias, lo cual podría ser de consecuencias impredecibles.

Un abrazo

Jorge Parra Zapata