Yucatán

Cada mes entran al corralón municipal casi 40 vehículos

TIZIMIN, Yucatán, 25 de febrero.– Un promedio de 40 vehículos ingresan cada mes al corralón municipal por diversos motivos, como accidentes de tránsito o conducir en estado inconveniente, pero no todos son recuperados por carecer de documentación o porque ya no es redituable rescatarlos por los daños que presentó el vehículo, así lo dio a conocer el director de la Policía Municipal Roberto Iván Pacheco Aranda.

Este último añadió que al mes ingresan alrededor de 40 vehículos, como antes se menciona, por diversos motivos, lo que al año sería un aproximado de 480 vehículos, entre coches, motos, camionetas, bicicletas y triciclos, de los cuales la mayoría son recatados la primera semana, pero el 10 o 15 por ciento de ellos no son rescatados por sus dueños porque causaron hechos de tránsito y fueron consignados ante la FGE, porque no cuentan con la documentación que acredite la propiedad (factura, tarjeta de circulación) o porque no reúnen el costo de la multa para la liberación, y ocupan un espacio en el corralón municipal, que se satura y se ven en la necesidad de resguardar algunos en la base de la policía municipal.

El motivo principal por el que el 10 o 15 por ciento de estos vehículos son olvidados, es porque tras verse involucrados en hechos de tránsito, a los dueños no les conviene pagar la multa para sacarlo del corralón, mucho menos les resulta redituable pagar la reparación, por lo que prefieren abandonarlo, pues es más benéfico para ellos conseguir otro vehículo que pagar.

El segundo motivo principal es que cuando algunos vehículos son detenidos por tener reporte de robo en otros lugares y algunos de sus propietarios no están interesados en recuperarlos, para evitarse gastos, claro esto dependiendo del tipo de vehículo y el momento en que se encuentre cuando sea recuperado.

¿Qué pasa con los vehículos que nadie recupera?

Los vehículos abandonados u olvidados en el corralón municipal, se mantienen cierto tiempo ahí bajo resguardo, posteriormente, bajo una sesión de cabildo que los regidores aprueban, son puestos a remate a algún taller mecánico o gente interesada para deshueso, y así liberan espacio para el ingreso de nuevos vehículos retenidos.

(Carlos Euán)