Proyecto 'Reggaetón no, jarana sí”, en secundaria de Xcumpich, Mérida

Alumnos de nivel secundaria de Yucatán pusieron en marcha el proyecto “Reggaetón no, jarana sí”, el cual fue inscrito en la estrategia nacional Somos el cambio, debido a que se enfoca a rescatar los valores culturales propios, informó la Secretaría de Educación del Gobierno del Estado.

En la plaza cívica de la Secundaria Técnica Número 2, ubicada en la comisaría meridana de Xcumpich, llegó por sorpresa una orquesta jaranera y alegró el inicio de la jornada escolar. A ritmo de seis por cuatro, el timbal, los metales, y niñas y niños ataviados con el traje regional yucateco, convirtieron ese espacio común en sede de una singular vaquería.

La maestra de Artes, Nancy Tamayo, explicó que “notamos que muchos estudiantes no sabían lo que era asistir a este tipo de fiestas tradicionales y por eso, con un grupo de alumnas y alumnos, decidimos hacer un flash mob para motivar y concientizar a los jóvenes sobre la importancia de preservar estas bonitas festividades”.

Aquel día se rompió la formación de jaraneros y jaraneras y con algunos pasos improvisados, el resto del alumnado se unió a esta iniciativa encabezada por jóvenes del colegio, quienes pretenden extender el orgullo por nuestra música, danza y tradiciones, al resto de sus compañeros.

Se pierde la tradición “En la ciudad ya se está perdiendo mucho la costumbre de ir a vaquerías y hacer bailes regionales en la escuela. Para seleccionar este tema vimos el problema de que se escuchaba mucho reggeatón y casi nadie conocía la jarana y pues nos pusimos a trabajar para que eso cambie”, dijo Tania Tuyú, alumna de esta secundaria.

Y ese es precisamente el título del proyecto que ya está anotado en la estrategia nacional de Somos El Cambio: “Reggaetón no, jarana sí”; en esta primera etapa los jóvenes que idearon esta actividad salieron de repente entre los salones, el teatro escolar, a un costado de la formación de sus grupos, portando el terno, guayabera, filipina, pantalón blanco y dispuestos a bailar.

“Vimos que muchos sí sabían bailar, pero no se motivaban porque les daba algo de pena, este ejercicio también era para demostrar que todos podemos bailar sin nos lo proponemos”, dijo la niña Evelyn Sulú.

Con el apoyo de vecinos del plantel, estudiantes de primarias aledañas, incluso del Centro de Atención Múltiple (CAM) “Luis Braille”, la orquesta jaranera entonó “Aires del Mayab”, el tradicional “Torito” y, por unos minutos, la comunidad escolar de la Secundaria Técnica Número dos se dejó llevar por la algarabía de esa música mestiza, tan nuestra y que nos da identidad ante el resto del mundo.

Con información de Rafael Gómez Chi

Por Redacción Por Esto!