VALLADOLID, Yucatán, 26 de marzo.- Al realizar un recorrido por los parques, las Iglesias y las unidades deportivas, nos pudimos percatar que se encuentran sin gente, sin feligreses y sin deportistas, situación que nos da la tranquilidad de que los habitantes, en la medida de sus posibilidades, se está quedando en sus casas ante los avisos de las autoridades por el Coronavirus, están respetando las medidas de seguridad.
Al acudir a la Iglesia de San Servacio, se notó que las rejas estaban cerradas y solamente se observó a dos taxistas esperando pasaje, quienes están pasándola difícil.
En el parque de San Juan, Bacalar, Santa Lucia y Sisal, la situación que se presenta es similar, solamente se notó a una que otra persona que circulaba por el lugar, pero ya nadie se está quedando a esas áreas públicas.
En las unidades deportivas se colocaron avisos de que está prohibido el acceso hasta el 18 de abril o, en su caso, se pudiera alargar. Lo que sí se notó fue que los Policías de las casetas de las unidades están atentos ante cualquier emergencia, ya que al acudir a San Juan, de inmediato se acercó para informar sobre la prohibición de realizar actividades físicas.
Ya no hay turistas en Valladolid, los pocos que circulan son los extranjeros que radican en esta ciudad desde hace ya un buen tiempo, y quienes ya adquirieron propiedades en la “Sultana del Oriente”.
Quiénes están laborando
Los vendedores de gas butano siguen trabajando y se nota de inmediato, porque son los únicos que siguen haciendo escándalo cuando se van acercando a tu casa; los molineros también siguen laborando, las tiendas de autoservicio, las ferreterías, venta de materiales para construcción, tendejones, las gasolineras y algunos vendedores de comida, quienes en su mayoría ya adoptaron la modalidad de servicio a domicilio.
Es importante seguir las recomendaciones de las autoridades municipales, estatales y federales para evitar el contagio del Coronavirus a más personas, y esta semana es la más importante para evitar la propagación, quédate en tu casa si no tienes por qué salir.
(Manuel Jesús Mena Novelo)