Yucatán

Pasan serios apuros "trabajadores del pedal"

PETO, Yucatán, 1 de abril.- Ante la cuarentena voluntaria de ciudadanos sensatos, petuleños que prestan el servicio de transporte local en triciclos pasan serios apuros para llevar el sustento a sus hogares; a pesar de las recomendaciones de las autoridades ante el Coronavirus (Covid-19), los trabajadores del pedal tienen que salir al no tener una entrada económica fija.

Poco más de 100 petuleños, en su mayoría adultos mayores, se dedican a transportar a los vecinos de colonia en colonia, sin embargo, las consecuencias de la pandemia actual les está pegando fuerte al no tener pasajeros y clientes fijos.

Juan Miss indica que, anteriormente, lograba juntar hasta 200 pesos diarios, pero con el exceso de mototaxistas, sus entradas se redujeron a poco más de 100 pesos diarios, con los que tienen que darle de comer a sus familias y realizar reparaciones a su herramienta de trabajo.

“Antes de que aparezcan los mototaxistas estábamos en la gloria, nos iba bastante bien, después los petuleños empezaron a preferir a los compañeros, quizá porque sus vehículos son más rápidos; nosotros los tricicleros solamente damos el servicio en colonias cercanas” señaló.

 

Momentos difíciles

 

Ante la contingencia por el Covid-19 y por las medidas tomadas por las autoridades, la situación de los tricicleros en Peto empeoró al no tener pasajeros ni clientes fijos, como estudiantes, funcionarios del gobierno municipal y empleados de empresas locales.

“Estamos pasando momentos difíciles con esta situación, por el coronavirus la gente no sale de sus casas, esta bien, que se cuiden, nosotros que no somos empleados fijos tenemos que salir a las calles y conseguir el pan de cada día. Esperemos que pronto se normalicen las cosas” añadió Juan Miss.

El trabajador del pedal compartió que, en las últimas dos semanas, apenas logra ganar 50 pesos diarios, algunos días le ha ido bastante bien al alcanzar los 100 pesos.

Los tricicleros mantienen la esperanza de que pronto acabará la incertidumbre por el Covid-19 para continuar ganándose la vida dignamente, como hasta ahora lo han hecho.

(Pedro Cauich)