Yucatán

Inconsciencia de la sociedad

VALLADOLID, Yucatán, 6 de abril.- Pese a las recomendaciones del Gobierno Federal y del Estado de Yucatán, además del Ayuntamiento a través de la Secretaría de Salud, han emitido y aplicado normas y recomendaciones extremas a la población en general, a fin de evitar el contagio y la propagación de la enfermedad del Covid-19, el cual ya es un pandemia en el mundo; mucha gente hace caso omiso y no las acata, corriendo el riesgo de que caigamos en situaciones difíciles de poder controlar.

La confianza y la cerrazón a aceptar la gravedad del problema, hicieron que en otros países el Coronavirus esté causando miles de contagiados, miles de muertes, incapacidad de atención tanto de instalaciones como de personal médico y medicamentos; es lo que no se quiere que suceda en nuestro país.

“No salir a la calle y permanecer en la casa”, es una de las recomendaciones más seguras para controlar los focos de infección; sin embargo, las personas de edad avanzada, personas con sobrepeso y personas con enfermedades médicas preexistentes como la diabetes, asma, e hipertensión, pueden estar más vulnerables a enfermarse gravemente y contraer Covid-19.

Actualmente se han suspendido clases en todas las instituciones educativas, cerrado oficinas de Gobierno, restaurantes, hoteles y demás comercios donde concurre mucha gente, en otras que permanecen abiertas, se controla la entrada con filtros sanitarios y por un número reducido de clientes y personal; se han emitido comunicados de retirar a sus casas a todos aquellos trabajadores con mayor riesgo de contagio, se perifonea y se vigila todas las áreas y entradas del país, de los Estados, las ciudades y de las comunidades y en algunas se está ya apoyando con despensas y apoyos para no tener que salir a adquirir algún producto.

Así mismo, se pide que sólo una persona viaje en un vehículo a hacer compras, muchos comercios ya dan servicio a domicilio, en los camiones de pasaje sólo se sienta una persona pegada a la ventanilla, y se ha llegado al extremo de multar, clausurar o meter a la cárcel a quien no siga estas recomendaciones.

Pero el día de hoy y los anteriores, en Valladolid y en muchas partes más del Estado, se ha podido constatar que bastantes habitantes exponen y nos exponen al no querer hacer caso de todo lo mencionado anteriormente: observando a niños y gente adulta en las calles, en los comercios y lugares públicos, no mantienen la sana distancia, no portan cubre-bocas, ni usan gel antibacterial y sobre todo, al llegar a sus hogares, seguramente no siguen las normas higiénicas para cuidar a sus familiares.

No nos gusta que se aplique el “toque de queda”, pero por aquellos que no entienden, nos sacrificamos todos.

(Ariel Sánchez Gómez)