Yucatán

Después de casi 40 días de inactividad, de nueva cuenta los instrumentos de los músicos de las diversas agrupaciones de mariachis, así como de trovadores que hay en la ciudad de Mérida, volvieron a sonar con motivo de las serenatas a domicilio que llevaron este 10 de mayo a muchas madres yucatecas.

Este 10 de mayo, agrupaciones de mariachis y de trovadores, tuvieron un leve respiro, luego de ser contratados sus servicios, para llevar serenatas a diferentes puntos de la ciudad de Mérida, así como del interior del Estado.

Diversas agrupaciones con motivo de esta efeméride, tuvieron dos o hasta tres servicios en un solo día, lo que representa para ellos un ingreso no contemplado dentro de esta cuarentena, pero el cual representa un ligero alivio para paliar la crisis económica que viven.

Las serenatas en esta ocasión fueron diferentes, no hubo aquello de que los músicos entraban al interior del domicilio a cantar a la persona festejada, hoy mantuvieron una sana distancia, algunos cantaron en el jardín, otros en la terraza junto a una ventana,pues su defecto sobre la banqueta de la vía pública a las puertas de algún predio.

Tomás Gamboa, presidente de la asociación de trovadores Pastor Cervera, informó que contrario a lo esperado este domingo 10 de mayo tuvieron dos servicios de serenatas, las cuales se realizaron, en el transcurso de la tarde.

Mencionó que a 40 días un poco más de que inició la contingencia y de que los trovadores abandonaron la plaza grande de Mérida, donde tradicionalmente esperaban cada noche para ser contratados, hoy muchos de ellos por fin tuvieron un poco de actividad a llevar serenata a las puertas de diferentes hogares, pero fue por vía telefónica, entre los conocidos.

En esta ocasión, la serenata fue a las puertas de las casas o junto a la ventana,por la cuestión de mantenerla sana distancia, muchos de nosotros somos personas mayores de 70 años, informó don Tomás Gamboa.

Temas como Las mañanitas, Solo tú, Manos de armiño, Señora señora, por mencionar algunas.

El precio de las serenatas osciló en mil 200, incluso en mil pesos, aseguró Tomás Gamboa.

Mencionó que la crisis los sacó de casa, ya que hay que hacer algo, y luego uno no come, sobre todos los trovadores que viven de las serenatas. Recordó que recibieron ayuda en esta contingencia, un directivo del Museo de la Canción les regaló mil pesos; asimismo el Ayuntamiento de Mérida, les ofreció ayuda.

Añadió que les están llamando por teléfono para solicitarles las serenatas, en la plaza grande ya no hay nada, nadie puede ir a pararse por la contingencia.

Por su parte Rogelio Ramón Caamal, del mariachi Alteño, informó que estuvieron laborando durante este 10 de mayo.

Añadió que esta fecha representó,un pequeño alivio para la crisis económica que todo el sector vive.

(José Manrique)