Yucatán

Pepenadores no paran de trabajar

TIZIMIN, Yucatán, 14 de mayo.- “Llueva, truene o haya mucho sol, tenemos que salir a pepenar a fin de tener algunos centavos para la comida”, fueron palabras que expresaron vecinos de la colonia Komichén, que se dedican a recolectar envases pet, aluminio y cartón.

Mencionaron que por la contingencia la situación decayó mucho, porque no hay mucho que recolectar, entrevistados mencionaron que normalmente acuden en los basureros a pepenar, donde logran obtener grandes cantidades de chatarras, pero por el Covid-19 estos lugares fueron cerrados por las autoridades perjudicándolos.

Familias de este rumbo, conformadas por hombres y mujeres no sólo se dedican a pepenar, sino que también como jornaleros, ya sea limpieza de terrenos, trabajo que realizan para ganarse para la comida, tal es el ejemplo de doña María Irene Puc Xuluc, Angélica Uc Carrillo.

Puc Xulux comentó que junto con su esposo Feliciano Uc recorren las diferentes calles de la ciudad para ir en busca de recolectar envases pet, cartón, para vender, “antes íbamos en los basureros ahí recolectamos mucha chatarra para luego venderla y obtener para la comida, tortilla, pero ahora la situación está critica, los basureros municipales fueron cerrados, en las calles ya casi no hay envases, latas de aluminio, porque muchas personas se dedican a eso por la misma situación que están atravesando”.

Felipe Santiago Uc señalo que ahora por la contingencia les está afectando porque no hay trabajo, “antes vamos entre cinco o más a los basureros para buscar chatarras, ya sea envases pet para luego venderlos y de esta manera salir para los gastos de la casa”.

Angélica Uc Carrillo dijo que a pesar de ser mujer ella desempeña labor como jornalera, “antes de la contingencia muchos nos venían a ver para que acudamos a limpiar sus terrenos, pero por el Covid-19 todo decayó, los trabajos, muchos se quedaron desempleados, ahora sólo de la pepena que hagamos, para eso tenemos que salir en las calles en busca de desechables, latas de aluminio para vender, pero son muy mínimos los ingresos que obtenemos por el kilo de envases, está a un peso”.

(Raquel Margarita Huerta)