Cerveza a domicilio para evitar aglomeraciones

El primero de junio concluye la Ley Seca

El Gobernador Mauricio Vila Dosal declaró ayer que el 1 de junio se levantará la “Ley Seca”, pero para evitar largas filas y aglomeraciones de gente, dialoga con las cerveceras para que la venta de esas bebidas sea a domicilio, al menos en los primeros siete días.

“La vamos a levantar el 1 de junio, estamos platicando, especialmente con las cerveceras para ver si la primera semana hacemos un esquema de solamente venta de servicio a domicilio, porque hemos visto los grandes amontonamientos de gente”, dijo en una entrevista.

Sinaloa ya permite el comercio de bebidas embriagantes, pero el Gobernador de Yucatán dijo que luego de varios días de “Ley Seca” en esa Entidad se han formado filas de hasta 200 personas y eso puede ser un factor de contagios de coronavirus.

Entonces, señaló Vila Dosal, “estamos dialogando con ellos buscando un mecanismo que permita que el primero de junio se levante la Ley Seca para que no tengamos estas aglomeraciones de gente, que es lo que menos necesitamos en estos momentos”.

Se amplió 2 veces

La “Ley Seca” se implementó en Yucatán del 10 al 30 de abril, pero Vila Dosal la amplió dos veces hasta completar el mes de mayo. El próximo sábado concluye y, de acuerdo con la ley, habría venta el domingo.

En sus declaraciones, Vila Dosal no se refirió a cómo será la comercialización de vinos, licores y cervezas en los supermercados y si se permitirá la reapertura de las agencias, ya que numerosas familias viven de un expendio y no han tenido ingresos en casi dos meses.

Es necesario apuntar que por causa de la “Ley Seca” han fallecido 20 personas; 18 por consumir alcohol adulterado en Acanceh y en la colonia Maya de esta capital, y dos más por ingerir gel antibacterial mezclado con refresco de cola por varios días.

Los clandestinos

También hay que anotar que el comercio clandestino de bebidas va viendo en popa con precios sumamente exagerados que, lamentablemente numerosa gente paga. Se han vendido “cartones” de misiles a 1,440 pesos y botellas de whisky que en el supermercado tienen un precio promedio de 600 pesos, a mil 500 pesos.

Mucho de ese comercio clandestino proviene de agencias cerradas, de robos a expendios y de producto que adquieren en otros Estados, donde la “Ley Seca” no es tan rígida, que pasan por carretera a escondidas, burlando retenes policiacos y revisiones de seguridad.

(Rafael Gómez Chi)