Yucatán

Piden que Dzemul sea incluido en declaratoria de emergencia

Dzemul debe ser incluido en la Declaratoria de Emergencia porque quedó como un lago: el 80% de sus casas y sus calles continúan inundadas, no hay agua potable, ya empezaron a aparecer enfermedades y no hay empleo.

Dulce María Aké Martínez, habitante de esa población, de 26 años y Licenciada en Derecho, dijo lo anterior y añadió:

–Nosotros queremos también que vengan las Fuerzas Armadas aquí con su Plan DN-III-E, con sus médicos, porque de tanto bogar agua en forma obligada día y noche la gente ya está sufriendo hongos en los pies, y que venga también con su cocina, porque las familias no pueden cocinar en sus casas, muchas se encuentran en tres albergues que han sido habilitados para atender a las personas más vulnerables, y las que pudieron se fueron a Mérida o se refugiaron en casas de sus familiares en las pocas partes donde ya bajó la inundación, pero los problemas subsisten y crecen.

–¿Por qué sigue inundando Dzemul si en otros lugares ya se está secando todo?

–Es que cuando paró la lluvia, en lugar de que bajara el agua de nivel, empezó a crecer la inundación con agua que al parecer viene del monte en camino a la ciénaga, pero acá se estancó.

–¿No hay pozos colectores del agua de lluvia?

–Sí hay, pero no se les dio mantenimiento preventivo, no los desazolvaron a tiempo, por eso están tapados. En otros pueblos sí los desazolvaron antes de las lluvias y ya se secaron las inundaciones. Aquí apenas el pasado domingo trajeron unas máquinas para desazolvar los pozos y supuestamente iban a limpiar 5, pero sólo funcionó con 2, porque los otros tres siguen igual, y hay otros 10 que necesitan que también los desazolven.

Agua fétida y amarillenta –¿Desde cuándo está pasando todo esto?

–Desde el último día de la lluvia, el domingo pasado, la inundación siguió creciendo y ahorita ya no sigue creciendo, pero está estancada. Muchas casas están inundadas, la mayoría. Algunas ya se secaron. Las que tienen agua está apestando y está contaminada con las fosas sépticas que rebosaron. Hasta los pozos que utilizan para tomar agua o al menos para lavar sus trastes y ropa están contaminados, el agua está amarilla, el agua de las casas y de la calle ya tiene olor fétido. La gente ya está teniendo hongos en los pies.

El problema más grande

Otra persona explicó:

–El problema más grande de desesperación de la gente es que, como las fosas sépticas están tapadas, tienen que buscar dónde hacer sus necesidades, entonces las hacen en el agua. Aproximadamente medio metro de altura tiene el agua, y los que no quisieron salir de sus casas para evitar que les roben, así cuelgan sus hamacas.

–¿Cuántos albergues hay?

–Hay tres. Como 30 ó 40 personas en cada albergue y muchas personas están en casas de familiares. Casi todas las casas están inundadas, algunas ya se están recuperando, pero el 80% todavía está inundado.

La necesidad prioritaria es el agua potable, la compran en botellón a $35, a $20, según la marca. Pero ya se están desabasteciendo.

–Dulce, dices que no hay agua potable, por qué?

–Ya no hay potable porque se rompió una tubería por el lado Poniente de la comunidad, en la calle 21, por el cementerio. Desde el domingo se interrumpió.

–¿Y los caminos?

–En la entrada, por Telchac Pueblo, no se puede salir ni entrar, y para entrar o salir se tiene que hacer por Baca, pero como Dzemul quedó como un lago, no es fácil.

–¿Todos los pueblos del rumbo sufren lo mismo?

–Bueno, en Telchac –por ejemplo–, el presidente municipal desde el comienzo de las lluvias desazolvó los pozos y abrió otros. O sea, que tuvo una movilización fuerte el de Telchac. El de aquí comenzó a traer unas máquinas el domingo para desazolvar, pero de 5 pozos que desazolvaron el primer día sólo 2 funcionaron, dicen que se necesita otra máquina, pero no la han traído.

–¿Cuántos pozos son?

–Son como unos 12 ó 15 pozos.

–¿Cuántos días bajó el agua del monte?

–El agua del monte estuvo bajando como 3 ó 4 días, porque dejó de llover y empezó a subir de nivel; entonces, como no funcionaron los pozos, venía del monte y de los poblados vecinos, Kinil, Sacapuc, es el lado del monte de varios lados de donde venía del Sureste y Suroeste.

Un lago –¿Qué profundidad tiene el agua estancada?

–Llegó a tener un metro, hay fotos que muestran el centro hecho un lago, y ahorita en muchos lugares todavía tiene 30, 40 ó 50 centímetros.

–¿Y cómo les fue a los agricultores?

–Se perdieron cosechas, también abejas, hay algunos apiarios que se inundaron. Todo lo que es la agricultura, la apicultura, cítricos, hortalizas, incluso a algunas personas que acaban de sembrar sus arbolitos de limón, se les inundaron y siguen así. Los montes cercanos a Dzemul están inundados.

Moscos y desempleo

Y ya hay otro problema: Desde anoche comenzaron a invadir los moscos a las familias, las casas. Y si desde antes de las lluvias, por el problema del COVID -19, ya había desempleo y ahorita se agrava más en todos los sectores, y hasta los campesinos no pueden trabajar. Todo está parado: el campo, la apicultura, la albañilería, el turismo, la pesca. El comercio sigue abierto, aunque en estos momentos hay escasez de alimentos básicos, es decir, que se está comenzando a dar el desabasto.

–¿Y la salud, cómo la atienden?

–La Clínica del Seguro Social no tiene medicamentos. No hay medicinas y el servicio siempre es un problema, la atención nunca ha sido buena y ahora menos. Por eso queremos solicitar que las autoridades pertinentes nos apoyen con el Ejército y el Plan DN-III-E, de desastres, y con medicamentos, sobre todo para los hongos.

Sólo un COVID-19 –¿Se están presentando otras enfermedades?

–Hubo un caso de COVID, pero ya está de alta y no hay eso. Lo que sí hay es que se están presentando malestares de garganta, gastrointestinales, por el agua.

–¿Dices que muchas familias no cocinan?

–Es que su estufa la tienen arriba del agua, no hay espacio para poner leña, no pueden ni cocinar. Dzemul no se declaró zona de desastre, pero sí debió declararse así. Es por eso que estamos acudiendo a POR ESTO! para que todos sepan que Dzemul es una zona de desastre y lo tomen en cuenta para que nos den la ayuda.

–¿Cómo están los productores de henequén?

–Muy mal, porque con la inundación cuando se calientan las aguas por el Sol, el henequén se sancocha y se pudre.

–¿Ya se había inundado así Dzemul?

–No. Este fenómeno nunca había pasado. Sí nos hemos inundado, pero esta vez fue muy fuerte. Con “Isidoro” nos inundamos, pero no así como esta vez.

–¿En su opinión, cuál fue el principal problema?

–Que los pozos no tienen mantenimiento, no les dieron mantenimiento desde antes y en el momento tampoco se les dio, hasta ahorita los están queriendo rehabilitar.

–¿Y el agua potable entubada, de dónde la extraen?

–El Sistema de agua potable es de pozo profundo, pero como le digo, desde el domingo dejó de funcionar.

Autoridad omisa

–¿Y qué dice la autoridad?

–La autoridad no habla. Cuando llegó la primera pipa salió el presidente municipal a decir que se está atendiendo el problema, pero ahora no sabemos dónde está, no sabemos si en su casa de Dzemul o en la de Mérida.

–¿Y la casa del presidente, se inundó?

–Su casa no está inundada porque ahí activó uno de los primeros pozos, uno de los 2.

–¿Y la fauna silvestre, también está sufriendo?

–Sí, también: aquí en la cabecera municipal vemos ardillas, conejos, aves, el ganado bovino, los carneros. Las aves están por las casas: torcazas, chachalacas, ardillas, concluyó.

Roberto López Méndez

Por Redacción Digital Por Esto!