Agentes de viajes y guías de turistas señalan que la reapertura de la industria turística no puede ser por “olas” o etapas, sino en forma simultánea porque de nada sirve que lleguen personas a Yucatán si no pueden visitar nuestros atractivos como cenotes, zonas arqueológicas, pueblos mágicos, etc.
Por otra parte, directivos de la Asociación de Agencias Promotoras de Turismo de Yucatán, A.C. (Aaprotuy) informaron que propietarios y empleados de agencias de viajes se capacitan sobre los protocolos sanitarios para poder reabrir sus negocios.
Indicaron que algunos socios envían cotizaciones con el fin de cerrar tratos para octubre y noviembre, porque al parecer comenzarán a operar hasta agosto y será entonces cuando se lleven a cabo campañas de promoción.
Desfase
Insistieron en que la reapertura de la cadena turística debe ser simultánea, porque hasta ahora las agencias están contempladas en la “ola uno”, mientras que las visitas a las zonas arqueológicas en la “ola tres”, desfase que presenta más inconvenientes que ventajas.
La Aaprotuy hizo un llamado al Gobierno del Estado a reconsiderar su decisión de abrir en forma escalonada la industria turística, porque de lo contrario será difícil convencer a la gente que visite nuestro Estado.
Por su parte, Manolo Solís Villamor, quien trabaja como chofer de grupos de turistas desde hace más de veinte años, manifestó que debido a que él, como otros más, trabajan de manera independiente no recibe ningún tipo de apoyo; remarcó que llevan más de 70 días sin ganar un solo peso, por lo que se las está viendo muy negras.
A su vez, Francisco González Hernández, presidente de la Cooperativa de Guías de Turistas, dijo que gracias a las despensas y a los mil pesos mensuales que reciben de apoyo por parte del Ayuntamiento de Mérida, sus 16 socios han podido afrontar los efectos de la contingencia sanitaria, pero los otros 150 guías que se calcula hay en Mérida atraviesan una difícil situación porque no tienen ingresos desde hace más de dos meses.
Negro panorama
–El panorama en el sector turístico es un poco “negro” y ahora para poder trabajar debemos registrarnos y asistir a los cursos que imparte la Sefotur para obtener la certificación que nos permita trabajar. Además, al inicio sólo se podrán atender a grupos de no más de doce personas, lo cual es bueno, porque los grupos masivos que llegaban de Cancún nos estaban sacando del mercado y, debido a ello, casi nadie quería ir a Chichén Itzá o visitar la ruta de los cenotes, y en Valladolid, de las 13 a las 17 horas, nadie quería ir, porque prácticamente se habían adueñado de esos polos, indicó.
Dijo que la pandemia de COVID-19 acabó con esa práctica por parte de las empresas de turismo masivo, que son monstruos que contaminan cenotes y pueblos.
Por último, dijo que durante los recorridos por las zonas a visitar los guías deben utilizar un equipo de sonido para que los turistas los puedan escuchar a determinada distancia sin temor a ser contagiados, pero eso será decisión de las autoridades.
(Víctor Lara Martínez)