Ante el ascenso de casos confirmados de COVID-19 en Tizimín, y sobre todo por la gran cantidad de asintomáticos que existen, los comercios de los diferentes giros ponen de manifiesto la seriedad que están tomando en torno a la contingencia y refuerzan sus medidas preventivas para que tanto sus empleados, como sus consumidores no se expongan al riesgo de contagios de coronavirus.
Son conscientes de que si se siguen las recomendaciones emitidas por las autoridades de salud y gubernamentales nos cuidamos todos y a la vez protegemos a nuestras familias.
Por doquier se observan empleados con sus cubrebocas y con sus caretas de acetato, sobre todo en los supermercados, e incluso en algunas tortillerías, también colocan una mesa a la entrada del negocio para evitar que la gente ingrese y se aglomere, atendiéndolos uno a uno, en ella se colocan botellones de agua para que la gente se lave sus manos con jabón o detergente.
También implementan la aplicación de gel a sus entradas, así como tapetes sanitizantes o pequeños depósitos para la desinfección de su calzado, se hacen filas fuera de los locales manteniendo la sana distancia e ingresan uno por uno, además de que solamente permiten que un miembro por familia ingrese a realizar sus compras, además de que sanitizan los carritos del super, sobre todo las agarraderas.
Otros lavan y sanitizan los productos que manejan y han colocado cintas de precaución para cerrar varias entradas dejando solamente una y también las colocan a cierta distancia de los mostradores para proteger tanto al cliente como al personal.
Ahora ya son varios los que también miden la temperatura de la gente antes de dejarlas entrar a comprar, sanitizan constantemente las instalaciones para evitar que se impregne el virus si alguna persona que sea portadora toca algo en su establecimiento, entre otras medidas preventivas que los expongan al menor riesgo de contagios.
Por Luis Manuel Pech Sánchez
Por Redacción Digital Por Esto!
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