Los comerciantes que se dedican a la venta de pirotecnia, comúnmente llamada “bombitas” en Yucatán, tienen sus esperanzas puestas en el fin de año, ya que la pandemia los ha dejado sin la oportunidad de vender sus productos durante las fiestas patronales, las cuales se cancelaron.
Los coheteros están esperanzados en los tradicionales “viejos”, muñecos llenos de explosivos que representan al año que se va y que son detonados el 31 de diciembre.
Noticia destacada
Piden a la FGE Yucatán atender el caso de la joven con discapacidad extraviada en Mérida
El propietario de la Feria de Pirotecnia, David Echeverría Urcelay, dijo que como empresario le está apostando a que las personas tendrán la posibilidad de darse un lujo, en este caso gastar en pirotecnia; sin embargo, se espera que esto sea hasta finales de año, cuando se acerquen las fechas decembrinas y los yucatecos compran “bombitas”.
“Los empresarios estamos apostando a que la gente va a querer un poco de esparcimiento con pirotecnia y reunión familiar al detonar estos productos”, comentó esperanzado.
Echeverría Urcelay lamentó que las fiestas patronales hayan hecho una pausa, ya que como empresario se vio afectado por tal situación.
“Una de las épocas en la que se vende bien la pirotecnia es durante las fiestas patronales, donde los gremios vienen a comprarnos voladores e hileras de petardos, pero este año por el COVID-19 todo se suspendió”, lamentó.
El comerciante indicó que sus ojos están puestos en la venta de fin de año, ya que hasta el momento es prácticamente nula. Aseguró que los precios que ofrece y la calidad es la única manera que tiene de competir con la pirotecnia de origen chino, que es cada vez más común de conseguir en distintos mercados de Mérida.
Este año Echeverría Urcelay organizó, junto con otros comerciantes, la Tercera Edición de la Feria de la Pirotecnia, ubicada en el kilómetro 12 de la carretera Mérida-Motul. Comentó que se tiene programado que este esquema de venta se mantenga en este sitio hasta el 31 de diciembre, con horarios de atención al público de las 10:00 a las 19:00 horas.
“La intención de poner la pirotecnia hasta aquí en un lugar tranquilo y con medidas de seguridad es para que la gente tenga la confianza de venir sin correr ningún riesgo”, aseguró.
Sostuvo que los artefactos explosivos que se comercian en la feria tienen poca carga pírica, es decir, poca pólvora, para que no sean una amenaza tanto para el visitante como para los empleados, y que los productos que vende son de origen nacional y con precios accesibles.
En la Feria de la Pirotecnia la gente puede comprar voladores de todos los tamaños, palomas, petardos, abejitas, garbanzos, cañones y toda clase de juegos de luces multicolores.
Por Guillermo Castillo