Tras sufrir la pérdida del ojo izquierdo en un accidente y con varias dolencias que lo aquejan, Luis Canché López no encontró trabajo, así que decidió fabricar utensilios de madera que vende para ganarse el sustento diario.
Mientras trabajaba en su pequeño taller comentó que se desempeñaba como contratista de obras de albañilería, pero el accidente lo obliga ahora a caminar apoyado en dos maderas, como bastones.
Recordó que también tenía una tiendita en una hacienda cercana a Molas, negocio que combinaba con su trabajo de contratista hasta que se cayó y quedó lesionado de la columna y piernas y para poder atenderse vendió todo lo que tenía: refrigerador, rifles con los que salía a cazar, etc.
Desesperado por la falta de dinero, hace tres años comenzó a fabricar cucharitas que vende a 10 pesos, con madera que obtiene de los huacales que le consigue su esposa.
Todas las artesanías las elabora con la ayuda de un machete y lijas, ya que carece de herramientas para elaborar otro tipo de piezas.
Por Víctor Lara Martínez