Debido a que laJunta Local de Conciliación y Arbitraje permaneció cerrada durante los momentos más álgidos de la pandemia, los asuntos de carácter laboral que ahí se atienden y que finalmente llegan a la consulta privada se incrementaron considerablemente, así lo informó el abogado y especialista en el tema, Miguel Ángel Tenreiro Cámara.
Dijo que, en su experiencia, en la práctica particular de los asuntos laborales que se atienden en diferentes puntos de la Entidad, estos se incrementaron de forma exponencial, especialmente los relacionados con despidos injustificados.
Indicó que los conflictos laborales que se han estado presentando desde el inicio del año, que tienen que ver con irregularidades entre la relación patrón-trabajador que se arrastran desde 2020, en el entendido de que tienen como eje rector la pandemia por COVID-19.
Explicó que el cierre de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje, mismo que duró cinco meses, terminó por impactar en el número de asuntos que se atienden, tanto en esta instancia, como en la práctica privada.
“Las cargas de trabajo derivaron en un rezago judicial importante, dado a la cantidad de casos que hay pendientes, tenemos en consideración que la Junta cerró de manera absoluta para marzo y se reabrieron las audiencias hasta agosto”, comentó.
El abogado especialista en el tema laboral indicó que las audiencias que estaban programadas para realizarse durante el periodo de cierre, lógicamente se fueron postergando, por lo que los despidos que se suscitaron para marzo se empezaron a tratar hasta agosto del año pasado.
El litigante externo que uno de los problemas que ha detectado en la Junta Local de Conciliación y Arbitraje es que, luego de cinco meses de cierre, al programar las audiencias entre las partes empleado-patrón, la carga de trabajo se fue acumulando entre casos que sucedieron desde el inicio de la suspensión de actividades y los que van surgiendo.
Detalló que, hasta antes del cierre, se estaban realizando alrededor de unas 23 audiencias al día; sin embargo, con la llamada nueva normalidad, ahora el número de casos atendidos es apenas la mitad.
Explicó que ahora, para las partes, primero se debe agendar una cita vía telefónica, para que los profesionales acudan en la fecha programada a analizar el expediente en cuestión.
En este sentido, destacó que “se ha hecho difícil, muy complicado, el litigar un asunto; la parte obrera han manifestado un descontento”.
Tenreiro Cámara, expresó que la mayoría de los casos que llegan a la práctica privada de la abogacía, en el tema laboral, son los despidos injustificados en los tiempos de pandemia por coronavirus.
Eso sí, indicó que también se presentaron casos en los que los empleados reportaron que sus empleadores señalando que no les pagaron completo durante meses, justificando estas acciones por la dificultad económica que se estaba pasando.
Recordó que la ley habla que, en escenarios de pandemia, la empresa o el patrón, cuando mucho, puede hacer una reducción a los sueldos por un mes, no más allá. Sin embargo, reconoció que, en el caso de la actual crisis sanitaria, los legisladores, al crear la ley, no se imaginaron que esta iba a durar el tiempo que está durando, por lo que el tema genera controversia.
Por otro lado, el experto dijo que también ha tenido conocimiento que además de la reducción de salarios, algunos patrones dejaron de pagar prestaciones como el Seguro Social y la vivienda.
A pesar de ello, Tenreiro Cámara recalcó que los despidos injustificados, salarios incompletos y la falta del pago de las prestaciones, son los asuntos que actualmente se están atendiendo en la práctica privada de la defensa del trabajador.