Disfrazados de los tres Reyes Magos, Juan Esquivel y Raúl Magaña salieron a recaudar fondos con la venta de roscas para aportar su granito de arena en el Centro de Rehabilitación Drogadictos Anónimos.
Representando a Melchor, Gaspar y Baltazar, el trío de jóvenes se instaló desde temprano en la avenida Juan Pablo II con 114 A, con la intención de juntar recursos para las diferentes necesidades del centro de juvenil.
"Nos gusta realizar actividades para el Centro de Rehabilitación, nosotros en su momento estábamos perdidos en el vicio a tal grado que nos alejamos de nuestras familias. En la actualidad trabajamos para ser mejores personas y nos gusta sentirnos útil con la casa que nos brinda el apoyo y la confianza", comentó Reinaldo Esquivel.
El grupo de jóvenes indicó que cada año realizan la misma actividad para no perder la tradición, el motivo es brindar el apoyo a las personas que van ingresando al grupo de Drogadictos Anónimos, "la idea es que con lo recaudado se puedan hacer mejoras en el albergue, tener alimentos, ropa y pagar servicios como luz y agua".