La preocupación de los habitantes de Sitilpech, comisaría de Izamal, por las afectaciones que provoca la granja de cerdos “Kancabchén II”, perteneciente al modelo de aparcería de Kekén, ha aumentado, ya que algunos pequeños citricultores no se explican el motivo por el cual sus cultivos no dan frutos y el por qué algunas presentan coloración negra en sus hojas.
Tal es el caso de Virgilio Chi, vecino de este pueblo maya, quien asegura que desde hace un año empezó a notar afectaciones en sus sembradíos, ya que las hojas de los árboles de limón y naranja dulce empezaron a ennegrecerse, lo que en un principio pasó desapercibido pensando que la afectación podría ser por alguna enfermedad o algún tipo de hongo.
En entrevista con POR ESTO!, contó que empezó a relacionar el problema de sus plantíos con el agua de su pozo desde hace 15 días atrás. Recordó que esa vez, debido a que su tinaco presentó problemas, tuvo que extraer el líquido para poder asearse.
“Me bañé con el agua de pozo y al día siguiente me dio rasquera en mi cuerpo. Me salieron como unos granos chiquitos que me provocaban mucha comezón”, indicó el poblador.
Explicó que anteriormente se bañaban con agua de pozo, pero nunca habían presentado ninguna afección de ese tipo, pero en esta ocasión sí, motivo por el cual mencionó que piensa que es posible que el agua se esté empezando a contaminar por la cercanía de la granja de cerdos, ubicada a casi un kilómetro de la comisaría.
“Antes tomábamos agua de pozo, mi mamá cocinaba con esa agua y no pasaba nada. Ahora veo que el agua nos afecta. Tengo miedo de que el agua esté contaminada”, indicó que el hombre de la tercera edad, quien destacó que su erupción cutánea desapareció a los tres días con una pomada, aunado a que sólo él enfermó tras bañarse con el agua de pozo, ya que ni su esposa ni sus nietos tuvieron problemas con ronchas en la piel.
Comentó que, a raíz de esta experiencia, ha dejado de usar el agua de pozo para bañarse, sólo utiliza el líquido para regar sus plantas, pero hasta sus plantas están siendo afectadas, ya que “ni mis limones florecen. Las hojas se ven negros. Es como si untaras carbón en las hojas, así están. Esta vez floreció mi lima, pero también quedaron negros como las hojas”.
En ese tenor, el entrevistado indicó que esta situación no había pasado con anterioridad.
“Voy a Izamal, veo las plantas de las naranjas y están bonitas las hojas. No se ven negras como aquí y ya no florecen. Pensé que se ponían por tanta lluvia que cayó esa vez; que era moho de tanta agua, pero resulta que no, ya no se quita, ya no florecen mis limones”, lamentó.
Pese a que sus frutos tienen un color negro, Cecilio Chi indicó que hasta la fecha el comerlos no le ha hecho mal.
“Hace dos años, estaban bien mis plantas. Florecían, daban frutos y volvían a florecer. Pero ahora, aunque le eche agua no florece. Yo creo que es la contaminación, porque las hojas se ven feos, tienen como granos las hojas y eso lo afecta”, insistió.
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aarl