El cambio al color verde en el Semáforo Epidemiológico en Yucatán, de nueva cuenta deja en total incertidumbre a los propietarios de las cantinas de la entidad, ya que desconocen si ya podrán operar o no, debido a que ninguna autoridad ha querido tomarlos con la seriedad que pide este sector empresarial, señaló Óscar Sauri Bazán, representante legal de Cantineros de Yucatán.
Recordó que operadores de este tipo de establecimientos se han conformado en una agrupación, misma que hasta el momento tiene cerca de 200 agremiados en todo el estado, a los cuales nadie les ha dicho “si pueden trabajar, si pueden o no funcionar” ya con este nuevo color en el semáforo de la entidad.
Como dimos a conocer desde el pasado jueves, el secretario de Salud del Estado, Mauricio Sauri Vivas, dijo que a partir del próximo lunes se autoriza la operación hasta las 2:00 horas con aforo del 75 por ciento de actividades económicas de cualquier tipo, al dar a conocer que por primera vez desde que comenzó la pandemia por COVID-19 en Yucatán se iniciara con el protocolo de Semáforo Epidemiológico verde.
Dijo que a los cantineros pareciera que los colores en el Semáforo Epidemiológico “ni les pinta ni les da color”, pues hasta este momento los funcionarios con los que se han entrevistado solo los dejan en total incertidumbre.
“Nosotros hemos insistido con el Gobierno la necesidad de ya abrir las cantinas, pero no dan una respuesta a los cantineros, nos han mandado diferentes funcionarios pero luego de la comunicación sólo dejan las cosas con más cuestionamientos”, declaro.
Señaló que parece que aún nadie entiende que de este sector comercial depende mucha gente y por lo cual no le prestan atención . Esto, a pesar de que han insistido en estar comprometidos con aplicar protocolos de salud para evitar contagios de coronavirus, para poder operar sin temer por cierres o clausuras, pero que lo que ya quieren es trabajar.
Sauri Bazán indicó que esta ampliación del horario hasta las dos de la mañana favorece a bares, sport bar, discotecas, loncherías o restaurantes con venta de alcohol, “¿pero para las cantinas tradicionales ésto qué implica? ¿Dónde está el levantamiento del cierre de las cantinas?”, subrayó.
El entrevistado dijo que irresponsablemente el Gobierno del Estado, cree que en 20 meses no ha pasado nada con las familias que dependen de estos giros o de que están viviendo.
Sauri Bazán señaló que tal parece que estos levantamientos de restricciones se hacen de manera muy parcial “y no quisiera pensar que únicamente pensando en el interés de sus cuates, que son los dueños de los restaurantes y bares del Norte de la ciudad y que el resto de la gente que siga viviendo en la pesadilla de no poder trabajar en su giro comercial y en lo que se han dedicado toda una vida”. Señaló que los cantineros no tratan de pelear con las autoridades, sino que se puedan llegar a acuerdos y consensos de comprensión sobre la situación económica que están atravesando en la cantina tradicional.
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JG