Después de estar esperando por varios meses su turno para recibir su primera dosis de la vacuna Pfizer contra el COVID-19, decenas de adolescentes de 15 a 17 años de la localidad y de San Crisanto, se dieron cita la mañana de ayer en el módulo que se instaló en la Cancha de Usos Múltiples ubicada en el CCD de la población.
Personal de la brigada de Salud dieron pase a los adolescentes en grupos de 40 con la finalidad de agilizar la vacunación. El personal médico, junto con un equipo de enfermeros, comenzaron con la aplicación del antígeno a las 8:30 horas. Algunos adolescentes se mostraban muy nerviosos, puesto que temían desmayarse como han pasado en algunas ocasiones en otras entidades del Estado y del país.
El total de vacunas que llegó a la comunidad fue de 150. Ante esto, los padres y madres de familia mostraron su descontento, pues temían que el antígeno se agotara antes de que todos los jóvenes sean inmunizados. “No puede ser que habiendo tantos jóvenes aquí en la localidad y en el puerto lleguen pocas vacunas a comparación de la cantidad que traían para los otros sectores de la población”, comentó una madre preocupada.
Una de las servidoras de la Nación, la ciudadana María Aguilar, comentó que desconocía el porqué de la cantidad de dosis que habían mandado. “En las reuniones que tienen los delegados, el Gobierno del Estado y la Secretaría de Salud tienden a disponer el número de dosis que nos mandan”, comentó. En el caso de que las dosis sean insuficientes para la población, el personal señaló que los jóvenes pueden acudir a la Unidad de Vacunación Permanente ubicada en el IMSS de Motul para recibir la inmunización.
También hubo tutores que manifestaron su descontento, pues afirman que no le quisieron aplicar la vacuna a sus hijos que habían cumplido la mayoría de edad en fechas recientes. Martha Chul Moo y Amy Moo Sánchez afirmaron que en la jornada de vacunación de 18 a 29 les dijeron a sus hijos que sus vacunas serían aplicadas en el grupo de los jóvenes de 15 a 17 años, ya que solo rebasaban el límite de edad por unos cuantos días. Las madres de familia aseguraron que hubo una falla en la organización y en la información difundida sobre el procedimiento a seguir.
Al final de cada grupo, el personal de salud comenzó a explicarles a los jóvenes las recomendaciones que deberán seguir después de pasar varios minutos en observación, para después proceder a retirarse sin ningún problema.
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CC