El Juzgado Tercero de Distrito con sede en Yucatán concedió un amparo a nueve guías de turismo de Chichén Itzá que demandaron al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y al director de la Zona Arqueológica, Marco Santos Ramírez, por negarles la posibilidad de ofrecer sus servicios dentro del sitio, por lo que no les quedará de otra que permitirles ganarse el sustento, informó Miguel Anguas, del colectivo KANAN Derechos Humanos.
El entrevistado explicó que el recurso con el que se impugna la orden del INAH de no dejarlos pasar a trabajar ordena al Instituto que rinda un informe, fundado y justificado del por qué se tomó la decisión.
“El INAH debe fundar y explicar la decisión; debe detallar en qué Ley o reglamento basa su decisión y por qué no los dejan trabajar y a otros sí. Con ello debe informar por qué esta determinación sólo aplica a esos nueve guías. Lo más probable es que no podrá hacer un escrito, porque no hay sustento, y considerable es que los guías puedan ingresar a seguir con su trabajo”, adelantó.
Rememoró que todo este tema empezó el año pasado cuando se cerró la Zona Arqueológica por la pandemia de COVID-19. Luego, el 22 de septiembre del 2020 se reabrió el lugar, pero no se permitió a algunos guías regresar a sus labores.
Expuso que el director de la Zona Arqueológica de Chichén Itzá Marco Santos Ramírez, les negó de palabra la posibilidad de ofrecer sus servicios. Sin embargo, en el lugar hay unos 25 guías, pero sólo a los nueve en cuestión se les impidió regresar a sus labores y no a los restantes 19. Comentó que la determinación fue “arbitraria” porque sólo se aplicó a unos cuantos y sin explicar cuál fue el criterio.
Con lo anterior, a los afectados se les dejó sin trabajo porque afuera de la zona tampoco pueden desarrollarlo, porque es un espacio ejidal y son los ejidatarios quienes deciden quiénes pueden ofrecer los servicios de guía, venta u otros.
“No hay un argumento. Es favoritismo, porque no hay una estructura administrativa con estabilidad. La relación que existe con guías y artesanos por parte del INAH es muy de palabra; lo que decida el director de la zona se hace. Así fue: un dedazo contra nueve que no le caían bien”, expuso. En este panorama, los guías de turismo promovieron un amparo el 2 de octubre del 2020, admitido por el Juzgado Tercero de Distrito. Tras cinco meses de litigio, la instancia concedió el amparo a favor de los guías de turismo, obligando así al INAH a garantizar los derechos de los prestadores de servicios.
“El INAH realizó un acto arbitrario contra personas que han esperado meses para volver a tener un sustento económico con la reapertura de Chichén Itzá y que llevan más de 15 años trabajando en el lugar. Así, esperemos que esta sentencia se cumpla para que los nueve guías de turismo puedan desempeñar su trabajo”, expuso.
Postura del INAH
Por la tarde de ayer, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH Yucatán) emitió una postura sobre este tema, proporcionada por el director del departamento jurídico, Arturo Chab Cárdenas:
“Al ser asuntos en revisión de un juzgado federal, somos muy respetuosos de las decisiones que tome el Poder Judicial, por lo que el INAH confía en la mejor resolución del juzgado respectivo y se procederá legalmente en consecuencia”.
SY